El presidente Lenín Moreno volvió a Ecuador el jueves de manera intempestiva poco después de haber llegado a Perú para asistir a una cumbre regional.
Su regreso ocurrió en medio de tensiones ocasionadas por reportes de que un equipo periodístico del diario El Comercio fue secuestrado por disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
El mismo mandatario escribió en su cuenta de Twitter: “He decidido retornar inmediatamente al Ecuador por la situación crítica que vivimos en estos momentos. Regreso junto a familiares de Javier, Paúl y Efraín”.
La cadena colombiana RCN publicó antes en la misma red social que recibió fotos de los periodistas y un conductor asesinados y que las remitió a las autoridades ecuatorianas y colombianas para su autentificación.
El ministro del Interior, César Navas, afirmó en rueda de prensa que “no hay confirmación (de la muerte de los comunicadores) al momento. Se va a continuar con las pericias, y sin duda alguna todos estamos consternados”.
Las autoridades colombianas también han realizado análisis de las fotografías y tampoco obtuvieron resultados concluyentes, añadió.
El periodista Javier Ortega (32), el fotógrafo Paúl Rivas (45), y el conductor Efraín Segarra habían viajado a la zona de frontera con Colombia para recabar información de la violencia en esa zona propiciada por grupos armados ilegales de ese país y se cree que fueron secuestrados el 26 de marzo por disidentes de las FARC.
No obstante, ninguna autoridad de ambos países ha confirmado ni ha negado la versión.
Poco después de llegar a Lima, Moreno se reunió con familiares de los secuestrados que también estaban allá y de inmediato volvió. El encuentro terminó con lágrimas de los parientes.
