De lunes a martes de la semana entrante, las empresas operadoras de criptomonedas Buda y Criptomarket, esperan recibir respuesta a la solicitud de medida precautoria, a fin de que las 10 principales entidades bancarias les reactiven sus cuentas bancarias, «congeladas» debido a un vacío legal.
Mario Bravo, representante legal de las empresas demandantes, confirmó que este viernes en horas de la mañana se introdujo la demanda ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (Tdlc).
«Los clientes están indignados, pero les hemos informado que todas sus inversiones están 100% garantizadas. Los bancos cerraron las cuentas debido a que las empresas operadoras de criptomonedas son competencia directa de esas instituciones», afirmó el abogado Bravo.
Bravo realizó un símil, que ilustra la situación: «Es lo mismo que las empresas operadoras de telefonía celular, realicen un bloqueo a la aplicación WhatsApp, para evitar que siga comunicando de otra manera a los usuarios».
«Los bancos cerraron las cuentas debido a que las empresas operadoras de criptomonedas son competencia directa de esas instituciones», afirmó Bravo.
Sobre las acusaciones que apuntan a que dichas operadoras de criptomonedas, podría servir al lavado de dinero, Bravo aseguró «desde hace tres años, las operadoras se han sometido voluntariamente a la supervisión de la Unidad de Análisis Financiero, entidad que siempre realizó una revisión al detalle de todas sus transacciones».
Recordó el hombre de leyes que, si bien esta actividad no está regulada, la Constitución de la República establece que el estado puede establecer una regulación a posteriori, pero jamás prohibir una actividad.
