Un día después de la primera vuelta presidencial dirigentes de la DC oficializaron su apoyo a la candidatura de Alejandro Guillier, respaldo que ofrecieron sin poner condiciones.
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La postura que el partido adoptó de cara al balotaje del 17 de diciembre, sumado a la renuncia previa de Carolina Goic a la presidencia de la Democracia Cristiana, sembró severas diferencias entre sus militantes.
Así lo demostró desde el primer momento la ex ministra Mariana Aylwin, o más recientemente la ex senadora Soledad Alvear, quien renunció a la Falange durante la madrugada de este domingo, luego de más de 50 años de militancia.
Según la propia Alvear, la decisión se habría debido a su deseo de formar un nuevo movimiento, idea que nació a raíz de la desunión dentro de la Democracia Cristiana luego de las últimas elecciones, en donde obtuvieron malos resultados tanto parlamentarios como presidenciales.
“Para trabajar en prospectiva del Chile que queremos de aquí a 30 años bajo esta visión humanista cristiana resulta mejor hacerlo en un proceso de superación fuera de esto y por ello tomé esta decisión”, se defendió la también ex secretaria de Estado en conversación con radio Cooperativa.
Al respecto, Máximo Quitral, doctor en Ciencia Política y profesor de historia de la U de Chile sentenció que no cree «que sea un gran movimiento, si bien tendrá apoyo no será masivo. Los principales líderes de la DC evitarán que haya una fuga masiva de militantes, si bien podría armar un grupo que la acompañe, no será tan gravitante en el ejercicio político».
«Ella es una figura emblemática de la DC, representa el tronco histórico (humanista cristiano) de la DC. Y claro, el partido siempre convivió con grupos, por lo que hay un segmento no menor cercano a Soledad Alvear y que solidariza con esta pérdida de sentido y de identidad, lo que explica la renuncia de la ex senadora», agregó el experto.
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Efecto dominó
Pese a ello, su ida gatilló una serie de renuncias por parte de jóvenes militantes que además podría arrastrar a su esposo, Gutenberg Martínez. El ex presidente de la DC anunció en entrevista con 24 Horas que este fin de semana dará a conocer si renuncia o no a su militancia, pues fue él uno de los impulsores del “proceso de reflexión” que desde principios de año vive la Falange.
De todas maneras Martínez ya ha dado luces de su intención a fines de enero, cuando tras la Junta Nacional de la DC anunció que evaluaría irse del partido.
La cercanía de la ex Nueva Mayoría con el Partido Comunista y el Frente Amplio, que entre otras cosas los llevó a votar favorablemente por el proyecto de aborto en tres causales, habría quebrantado los valores cristianos presentes en el matrimonio. Incluso la misma Alvear realizó lobby en contra de esta tramitación, pidiendo a los parlamentarios que recapacitaran sobre la medida.
«El partido ya no tiene remedio», habría dicho el ex diputado Gutenberg Martínez a un grupo de militantes, según consignó El Mercurio. Algo parecido a lo que diría Pablo Piñera a La Tercera luego de su renuncia al partido tras haber militado durante cuatro décadas : “en los últimos años, el partido ha perdido en forma sostenida su identidad y ha ido tomando una actitud de subordinación respecto de otras fuerzas políticas, que son reflejo de otros pensamientos, que yo no comparto”.
Entre los nombres que se barajan sigan a Alvear están los ex subsecretarios Zarko Luksic y Felipe Sandoval; el ex director de la Junaeb Cristóbal Acevedo; la constitucionalista María Pía Silva, Nelson Hadad y el ex embajador Eduardo Rodríguez Guarachi.
A ellos se sumarían militantes de base, los que se estiman entre 50 y 100 renuncias. Cabe destacar que durante el año pasado 3.577 miembros renunciaron a su militancia, quedando la Falange con menos de 32 mil afiliados, 14 diputados y 5 senadores.
“Respetamos su decisión y estamos seguros que volveremos a reencontrarnos en acciones políticas tendientes a construir una nación”, escribió la DC en un comunicado público frente a la renuncia de Alvear.
En tanto este lunes se realizó su Consejo Nacional, marcado por la renuncia de Alvear y por las prontas elecciones internas.