Una noticia que los hipster no celebrarán con mucha efusividad -nunca celebran nada con efusividad- es la que se conoció durante la jornada de este martes: el Ministerio de Obras Públicas junto a vecinos del Barrio Lastarria acordaron que se reanude las obras que tenían las calles Namur y Villavicencio cortadas, haciendo difícil llegar en bicicleta al cine, librerías y bares de este lugar.
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Según indicaron desde la cartera, fue el mismo ministro Juan Andrés Fontaine quien se comprometió con los vecinos del Centro Cultural Gabriela Mistral a reanudar los trabajos abandonados a fines del año pasado.
Cabe mencionar que mayo de 2017 se rompió la estructura de estas calles, pero luego los trabajadores abandonaron la obra. En ese sentido, se comportaron como algunos protagonistas de los cuentos de Antón Chéjov: destruyeron algo pero luego no se hicieron cargo.
«Queremos avanzar»
El barbón ministro, que también usa lentes de marco grueso, consiguió encomendar las obras a nuevos contratistas, miembros de la Empresa de Asfaltos Bitumix, todo a través de decretos de emergencia. La idea es tenerlo todo listo en tres meses, plazo óptimo para alcanzarse a leer unos tres libros de Fiódor Dostoyevski o, por qué no, ver cine del chileno Alejandro Jodorowsky (para luego criticarlo a rabiar).
«Aquí se ha producido un grave atraso de parte de la empresa constructora y por eso separamos los contratos, queremos avanzar prontamente en la solución de este problema que afecta a los vecinos del barrio y pone en peligro la seguridad de las personas que también lo visitan. Estamos atentos al desarrollo de estas obras, las que estimamos estén operativos para el flujo vehicular y peatonal durante el mes de julio”, señaló la autoridad.
Adoquines antiguos y nuevos
Los trabajos presentaban un 55% de avance antes de que todo se fuera en una espiral ascendente de confusión. No obstante, ahora las incógnitas respecto al destino de las calles se van despejando de a poco: se contempla intervenciones en calle Namur y los pasajes José Ramón Gutiérrez y Luciano Kulczewski, donde hay buenos bares y unas sangucherías a precios módicos. Ahí se repavimentará con una carpeta de hormigón, para que los violinistas o músicos de charleston que a veces animan la fiesta, puedan instalarse con más comodidad.
Por otra parte, en las calles Villavicencio y Estados Unidos se realizará la recuperación de los adoquines originales, algo súper loco pues en las últimas décadas estas calles permanecieron cubiertas con asfalto. Por lo mismo, con la recuperación quedarán aún más vintage. ¡Ideal para filmar cortos o videoclips!
Esta recuperación, avaluada casi $1.200 millones, se realizará con adoquines antiguos y nuevos, mientras que para las veredas de este sector de Barrio Lastarria se contempla la instalación de baldosas.