El 11 de diciembre del año pasado un voraz incendio se desató en una vivienda de Salford, en el Reino Unido, y las llamas atraparon a una familia completa.
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Michelle Pearson se encontraba con sus cuatro hijos y resultó con quemaduras horrendas y quedó en estado crítico. Lamentablemente sus hijos no lograron sobrevivir al infierno Demi (15 años), Brandon (8) y Lacie (7) murieron en el lugar, mientras que Lia (3) falleció días después en un hospital, indica Manchester Evening News.
La mujer de 35 años fue sedada, entró en coma inducido y los doctores la mantuvieron alrededor de tres meses en dicha condición.
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Hace dos semanas que Michelle “volvió” del coma, y su salud mejoró significativamente, por lo que los profesionales decidieron que era el momento de darle la terrible noticia.
La policía confirmó que le contaron que sus cuatro hijos habían fallecido en el incendio.
Ahora se espera que en algún momento la mujer pueda comparecer ante la justicia, ya que según las investigaciones de la policía el siniestro podría haber sido premeditado, señala Mirror.
Courtney Brierley, Zak Bolland y David Worrall están acusados del asesinato de los cuatro menores, de incendio premeditado con la intención de poner en peligro la vida y el intento de asesinato de Michelle.
En la audiencia de preparación del juicio, el que empezará la próxima semana, los tres imputados se declararon inocentes.