Según cifras del Ministerio de Salud, 30% de las licencias laborales de 2017 fueron por estrés laboral. De igual modo, un estudio de la consultora de Recursos Humanos Page Personal reveló que 61% de los chilenos ha declarado sufrir de estrés en el trabajo en más de una ocasión.
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“El estrés es uno de los grandes males de nuestro tiempo. En ello influye que gran parte de la población se encuentra inmersa en una sociedad globalizada, que hace altísimas demandas a los individuos, sin detenerse en las necesidades físicas y emocionales de esas personas, que comienzan a sentir que no pueden responder a sus tareas diarias”, asegura Marcela del Barrio, directora de Gestión de Personas de Sodexo Servicios de Beneficios e Incentivos.
Las causas del estrés son variadas, pero incluyen inseguridad laboral, largas horas de trabajo, falta de oportunidades para el desarrollo, bajos salarios y falta de reconocimiento. En este contexto, una de las nuevas tendencias para combatir el estrés laboral es la denominada Feel Good Management. Se trata de una práctica que apunta al establecimiento de ambientes de trabajo saludables con el fin último de aumentar la felicidad de los colaboradores.
Del Barrio destaca que, entre otros beneficios, la felicidad en el trabajo “trae consigo una mayor productividad, una mejor calidad del trabajo, disminuye el ausentismo, mejora los índices de atracción y retención del talento e impacta positivamente en las cifras de satisfacción de clientes, considerando que colaboradores felices son la mejor base para un buen servicio”.
Felicidad y productividad
El Feel Good Management manifiesta la conexión entre el sentir de los individuos y su efectividad en el trabajo. Su énfasis reside en encontrar formas personalizadas para hacer que los colaboradores o sus equipos se sientan felices en el trabajo.
Su establecimiento implica tomar la iniciativa en la organización del desarrollo de ejercicios de creación de equipos o de eventos sociales, sea en el lugar de trabajo o fuera de él, y proporcionar mentores a nivel individual o colectivo. Esto incluye ayudar a los colaboradores nuevos a establecerse, apoyar los programas de cambio y ayudar al personal a lidiar con el estrés.
El enfoque Feel Good también sirve para alentar a las personas a tomar decisiones positivas sobre su estilo de vida. Evidentemente, el aporte de las empresas al brindarles a sus colaboradores la oportunidad de acceder a alimentos nutritivos, trabajo flexible y relajación en forma de entrenamientos físicos o ejercicios de yoga/mindfulness puede ayudarlos a lograr esos objetivos.