Cuentas alegres sacaron las empresas chilenas que participaron entre el 7 y el 10 de mayo en la feria Apas 2018, el encuentro de los principales compradores de las cadenas de supermercados de Brasil, y una de las más destacadas de Latinoamérica y del mundo por el volumen de negocios que se generan.
PUBLICIDAD
Para Chile, Brasil se ha consolidado como el cuarto destino para sus envíos No Cobre a nivel mundial, y el primero de América Latina. Destino importante para los productos del mar, vinos, aceite de oliva, frutos secos, entre muchos otros. De hecho, las nueces fueron el tercer producto del sector alimentos más exportado a Brasil, con envíos en 2017 por US$ 33 millones, con un alza de 28% respecto del año anterior.
“Hemos visto gran interés por nuestros productos en diferentes formatos. Sin duda cumplimos nuestras expectativas de participación en APAS y en este mercado” comentó Matías Rodríguez, gerente general de Southern Walnuts, exportadora de frutos secos que en su primera acción comercial en Brasil lograron concretar negocios por US$ 150 mil con un importador de Sao Paulo, lo que equivaldría al 5% de sus ventas actuales.
Otro sector fue el de productos del mar. La exportadora de mejillones St. Andrews comprometió la venta de un volumen importante de productos. “Todo indica que cerraremos 150 toneladas de producto para embarcar en los próximos seis meses con los actuales clientes, y vemos un potencial de 50 toneladas adicionales para nuevos compradores” manifestó el gerente de ventas de la compañía, Pedro Ovalle.
En el sector vitivinícola, las empresas se reunieron con nuevos compradores, lo que debería traducirse en nuevos negocios en el corto plazo.
La participación de 19 empresas chilenas en el encuentro de la Asociación Paulista de Supermercados fue organizada por ProChile, en el marco de la estrategia de promoción internacional de la oferta exportable nacional.
La agregada comercial de Chile en Sao Paulo, María Julia Riquelme, señaló que “Apas nos permite acceder al mayor poder comprador de Brasil, lo que convierte esta feria en una oportunidad real de negocios para los exportadores chilenos, especialmente de frutos secos, productos del mar y vinos. De hecho, sólo en 2017 nuestros envíos de alimentos alcanzaron los US$ 1.013 millones, marcando un récord en este mercado”.
