Desde que el abuelo de la niña perdida en Licantén, Rafael Vidal, fue detenido por presunto tráfico de drogas, todo en este caso se ha complicado. Así al menos lo manifiesta la defensa de José Navarro (31), quien se encuentra en la Cárcel de Rancagua tras pasar escondido ocho días con la menor en un bosque en Licantén en febrero pasado
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El abogado que quedó a cargo de representarlo es Jorge Arroyo Salgado, quien asegura que desde que cayó el abuelo de la muchacha, su defendido ya ha recibido una amenaza de parte de internos cercanos a Vidal.
«Son amenazas que vienen de parte de la familia del abuelo de la pequeña, que fue detenido», indica a Publimetro. ¿La razón? La carta que publicó el supuesto secuestrador de la menor donde acusaba directamente de narcotráfico «al viejo», que es como se refería en esa misiva a Vidal.
«Él está al tanto de la detención de Vidal. Sabe que van a quedar en penales distintos por medidas de seguridad. Pero aún así ya ha sido amenazado por internos, según me dijo en la entrevista individual de hoy (jueves) y que serían cercanos a Vidal», reitera Arroyo.
Otros reos le creen
Salvo esa excepción, Arroyo asegura que el resto de la población se ha portado bien con Navarro «porque los reos le creen».
«Los reos comprenden su perspectiva, esa que indica que siempre trató de proteger a la niña. De hecho nunca la dañó ni física ni psicológicamente», sostiene.
Es más, agrega que «él proyecta una credibilidad porque afuera fue una persona trabajadora y eso también influye en la opinión que tienen los otros reos ahí. Él está con otros interno dentro de la celda, no está aislado. Existe un buen trato de los otros interno hacia él, existe una buena convivencia, no hay ningún tipo de desórdenes, no hay nada de eso. No ha recibido ningún golpe y está tranquilo», asegura.
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Reformalización
Cabe precisar que este viernes a las 11:00 Navarro será reformalizado por abuso sexual en el Tribunal de Garantía de Licantén, luego que el Servicio Médico Legal confirmara que hay «indicios» de que se haya cometido ese delito. El abogado Arroyo cuestiona esta tesis.
«La Fiscalía tiene todos los medios tecnológicos, todos los recursos humanos para haber apurado esta diligencia que, en menos de un mes, hubiese sido posible tener a la vista. Me parece extraño, tal vez es una maniobra dilatoria para poder obtener que mi representado algún tipo de culpabilidad», critica.
Por último, sobre la acusación que hizo Navarro en su carta al fiscal Mauricio Richards de manipular el testimonio de la niña, el abogado también tiene algo que decir.
«No sé si estará viciando pero si mi defendido señala eso, perfectamente podría darse el caso que el testimonio de la menor haya podido ser manipulado por la fiscalía, en atención al transcurso del tiempo», indica Arroyo. «Eso no lo descarto», sentencia.