Es la pregunta que varias personas se han hecho luego de que el Presidente Sebastián Piñera diera a conocer en su cuenta pública la construcción de las líneas 8 y 9 del Metro, las que se suman a la ya anunciada línea 7 y a la extensión de la línea 4 hasta Bajos de Mena: ¿cómo se verá afectada la plusvalía de las viviendas cercanas a las nuevas estaciones?
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Si bien los trazados oficiales aún no son definidos por la empresa de transporte público, algunos planos dados a conocer anteriormente darían nociones sobre el trayecto que seguirán los trenes subterráneos, lo que de paso ha generado especulación sobre la revalorización de los terrenos.
Para el presidente de Metro y experto en transportes, Louis de Grange, el aumento de la plusvalía es algo normal, aunque no será de forma automática. “Existen tres momentos en los que una vivienda podría incrementar su valor: primero, cuando se tiene la certeza de qué estaciones de Metro se construirán y dónde. Segundo, una vez que estas entran en operación, y por último, cuando distintos servicios se posicionan en las cercanías de una parada”, explica.
Un proyecto de largo plazo
El plano regulador de la comuna, si la estación de Metro es subterránea o no, el comercio y servicios de salud son sólo algunos de los factores que influyen en el aumento de la plusvalía, por lo que los expertos afirman que establecer un monto exacto para todos no es posible. “Como son proyectos de largo plazo, la fluctuación de valores es muy amplia, aunque luego del anuncio de Piñera es probable que las viviendas que se encuentren en los trazados del Metro ya hayan aumentado entre un 10 a un 20% de su valor”, asegura el economista y académico de la Universidad Mayor, Tomás Flores.
Luego del anuncio de Piñera, es probable que las viviendas que se encuentren en los trazados del Metro ya hayan aumentado entre un 10 a un 20% de su valor
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Por su parte, el urbanista y docente de la Universidad del Desarrollo, Julio Nassar descarta de plano un aumento tan violento: “Lo que se genera es una mejor conectividad, pero eso es sólo una de las variables. Por ejemplo, hablar de especulación en La Pintana con la línea 9 es más complejo, porque hay muchos otros factores a considerar, como las áreas verdes y colegios”, advierte.
En el caso de La Florida y Macul con la línea 8, Nassar explica que podría darse un mayor incremento por los mejores accesos, lo mismo que en el eje de Santa Rosa en Santiago Centro. Hacia el sur, en el anillo de Américo Vespucio, los cambios no serían significativos.
¿Vender o no vender?
Para aquellos que estén pensando en vender su propiedad, la recomendación es esperar: “En este minuto la gente tiene la sartén por el mango. Si mañana llega una inmobiliaria a preguntarle si le puede vender el terreno, de seguro sacará mucho menos dinero que si lo vende una vez que ya esté la estación de Metro construida, o al menos con la definición de dónde se construirá. Tiene que dejarse seducir, tiene tiempo para coquetear”, aconseja Flores.
Otra recomendación es estar atento a los anuncios que haga el alcalde de cada comuna. “Si se llega a modificar el plano regulador, sumado a una nueva estación de Metro, podrían aumentar aún más los valores”, concluye el académico.
