La Familia Real inglesa no es ajena a los escándalos y polémica, los matrimonios de los príncipes Harry y William con plebeyas han traído consigo algunas consecuencias, como las personas que se toman atribuciones de más.
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En los días previos a la boda de Meghan y Harry, el mundo pudo conocer las historias de su hermana envidiosa, su padre desubicado y un par de sobrinos buscando fama y fortuna.
Pero lo que muchos quizás han dejado pasar por debajo de la mesa, es que Kate también fue abochornada por su familia, específicamente por un tío materno.
El personaje en cuestión es Gary Goldsmith, hermano menor de la madre de la duquesa de Cambridge de 52 años y quien en su primer matrimonio tuvo a Kate y Pippa en el cortejo.
Durante el noviazgo de William y Kate en 2006, la pareja compartió con el tío incomodo unas vacaciones en Ibiza en la llamada “Mansión del sexo” propiedad de Goldsmith quien se mudó a este destino luego de vender su compañía de tecnología.
Tres años más tarde, el tío Gary apareció en el Daily Mail por haber sido sorprendido ofreciendo drogas a un periodista encubierto en Ibiza, en esa oportunidad el hombre alardeó sobre conocer al príncipe y los planes de boda.
Pero esto no fue motivo suficiente para sacarlo de la lista de invitados de la boda real de los duques de Cambridge, por lo que en 2011 fue uno de los asistentes al enlace.
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En 2013, Goldsmith aceptó el pago de la revista Hello para hablar sobre la vida intima de su sobrina de la realeza y así lograr aplacar en parte sus problemas económicos en el momento.
La seguidilla de momentos polémicos del tío de Kate llegó a su cumbre el año pasado cuando fue por golpear a su quinta esposa Julie-Ann.
El hombre se declaró culpable, pagó una fianza y fue enviado a un centro de rehabilitación por abuso de alcohol.