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Según el senador Manuel José Ossandón (RN), hay una grabación de la noche en la que Felipe Osiadacz (27) y Fernando Candia (28) se enfrentaron a un ciudadano de Malasia y que terminó con la muerte de esa persona. A juicio del parlamentario, estas serían muy negativas desde el punto de vista de su defensa pues, sostuvo, las imágenes «los inculpan». Tales palabras desataron el enojo del asesor de una de las familias quien salió a cuestionar estos dichos.
El enojo se gestó durante el fin de semana, cuando Ossandón declaró a CNN Chile que «la situación de ellos es sumamente grave, porque hay grabaciones que los inculpan seriamente».
En esta entrevista el ex precandidato presidencial agregó que «un funcionario de la Cancillería me dio toda la información que pedí y me contó que salía en la grabación» y luego explicó que, según lo escuchado, ambos jóvenes habrían estado varios minutos atacando al ciudadano malayo.
«Uno se sentó en el pecho y el otro le levantó los pies. El malayo se empezó a ahogar hasta que se murió», relató Ossandón. No fue todo, agregó que «después de la información que me dieron, soy súper pesimista».
Enojo de la defensa
Tales palabras desataron la furia de Juan Carlos Manríquez, abogado asesor de una de las familias de los jóvenes que esperan su juicio tras la cárcel de Malasia.
«Me preocupa el hecho de que el señor parlamentario haya dicho que él no vio el video sino que un tercero se lo relató y que sobre eso haga un juicio categórico que puede poner en riesgo la vida de dos personas en un estado muy lejano», manifestó en una entrevista otorgada a Radio ADN.
Pero no fue todo: quiso descartar que el ciudadano malayo haya muerto producto de golpes y enfatizó que el deceso, según lo que él ha conocido, se dio «como consecuencia de una ataque cardíaco con una ingesta considerable de, al menos, cinco drogas».
Por último, hizo un llamado a evitar este tipo de declaraciones, pues podría perjudicar en el proceso, más que ayudar. «No hay ningún antecedente, que yo conozca, que pueda sostener un homicidio, sino más bien condiciones de un ataque confuso y donde dos personas se defienden», sentenció el jurista.
Cabe mencionar que los jóvenes se encuentran actualmente recluidos en una cárcel de Kuala Lumpur en Malasia, a la espera de un juicio programado para agosto.
