17 años después de su peor crisis económica en la historia, Argentina parece estar reviviendo hoy los fantasmas del 2001. La devaluación del peso argentino frente a la sostenida alza del dólar, la dependencia del financiamiento externo y el déficit fiscal y comercial tienen sumido al país trasandino en la incertidumbre. Y los efectos podrían sentirse también en Chile.
PUBLICIDAD
Según los expertos, Argentina podría comenzar a reducir la cantidad de productos y servicios importados desde nuestro país, como agropecuarios y manufactureros, aunque la peor parte se la llevarían las empresas que estén operando allá. “Compañías como LATAM o del retail de seguro verán disminuidas sus utilidades. La gente ya no está comprando como antes porque la inflación se ha elevado mucho”, señala el director del Centro de Estudios en Economía y Negocios UDD, Cristián Echeverría.
Del mismo modo, aquellas personas que estaban pensando en viajar al país trasandino para comprar productos, quizá deberán replantearse la idea. “Si tú viajas con un buen tipo de cambio en dólares, obviamente tendrás una buena recaudación, pero de ahí tienes que restar todo el extra que pagarás por la inflación, entonces no te saldrá muy a cuenta. La gente no suele pensar en eso antes de gastar”, explica economista y académico de la Universidad de Chile, Alejandro Alarcón.
¿Se acaba el turismo argentino?
Postales como la del Costanera Center repleta de trasandinos con maletas en busca de productos podrían quedar en el pasado, según cuenta Echeverría. “La moneda argentina se ha depreciado mucho, no así el peso chileno, que se ha fortalecido. Venir a nuestro país a comprar cosas ya no será tan atractivo para el turista argentino, no les saldrá tan a cuenta y preferirán quedarse allá”, explica.
Una postura distinta tiene Francisco Sánchez, historiador económico que ha seguido de cerca el caso. Según cuenta, el presidente argentino, Mauricio Macri está apostando por mantener el flujo de dólares en las calles, por lo que “el argentino promedio seguirá teniendo acceso al billete verde, aunque les salga más caro que antes. No me extrañaría que escenarios como el de Semana Santa, con cientos de argentinos llegando para comprar en los malls, se repita. Nuestro mercado sigue con una gran variedad de productos y ofertas, y eso seguirá atrayendo a los turistas”.
Chile sin aliados
Para el analista internacional Guillermo Holzmann, otro punto importante tiene que ver con las estrategias internacionales. “Chile por sí solo no es tan influyente como para imponerse en los mercados mundiales, por lo que necesita de un bloque que aumente su atractivo”, explica. Sin embargo, Argentina “está preocupada de sí misma ahora, al igual que Brasil con su crisis política y social, lo que impide una alianza. Chile se va a ver aislado y eso puede complejizar el desarrollo de nuevos acuerdos internacionales, los que serán vitales ante una posible guerra comercial entre Estados Unidos y China”, advierte.