Una joven de 15 años enterró a su bebé recién nacida en el patio de su casa, ubicado en un barrio de Buenos Aires, Argentina.
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La pequeña fue rescatada por la Policía tras la denuncia de una vecina que había alcanzado a escuchar gritos y llantos. Según el informe, la joven comenzó a dar a luz cuando sus padres salieron de casa. Fue entonces cuando la vecina comenzó a escuchar ruidos y de repente, silencio.
«El bebé lloró un rato y después no lo escuché más, no escuchaba tampoco a ningún adulto. Estuve una hora sin saber qué hacer, porque no escuchaba adultos y pensé que lo habían abandonado».
De repente, el llanto de la niña volvió a escucharse pero de forma más tenue. Fue en ese momento cuando decidió llamar a la policía para investigar. Cuando las autoridades llegaron, encontraron a la bebé en un pequeño pozo de unos diez centímetros de profundidad, tapado con chapas. La joven confesó que ella era la madre. La Fiscalía de Responsabilidad Juvenil del Departamiento Judicial busca aclarar las circunstancias que llevaron a la joven a ocultar su embarazo y querer terminar con la bebé.
De momento, madre e hija permanecen fuera de peligro en el hospital. La bebé se encuentra estable y con respiración asistida.