Es de conocimiento público que el rey Juan Carlos no soporta a la esposa de su hijo, Letizia Ortiz.
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Desde antes de la boda, el padre de Felipe no quería que la experiodista perteneciera a la familia real, y a lo largo de los años han surgido algunas rencillas que han empeorado su relación.
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Pero, hubo tres momentos en los que el rey Juan Carlos humilló y provocó a la reina Letizia, a la cual nunca quiso por ser divorciada, y considerarla un peligro a la familia real española.
Letizia, la chacha
El rey Juan Carlos sabía que Letizia podría ser una amenaza para la corona, pero confiaba en que solo sería un capricho de su hijo y que pronto se acabaría la relación. Pero no fue así, y en lugar de terminar, Felipe le pidió matrimonio, pese a que sabía que sus padres no la aceptaban.
Esto no le cayó nada bien al rey quien calificaba a Letizia como “una mujer divorciada más” e incluso la llamaba despectivamente como “la chacha”.
“Deja hablar a los demás”
Otro de los sucesos en los que el rey emérito Juan Carlos I dejó en evidencia a Letizia ocurrió poco después de que ella entrara en la Familia Real.
Estaban todos reunidos con el rey Constantino de Grecia, el hermano de la reina Sofía, hablando de la situación en Irak, que estaba siendo arrasado por la guerra. Letizia soltó un discurso de 20 minutos sobre la situación.
Por lo que el rey le dijo: “Letizia, ya sabemos que eres la más inteligente de la familia, pero por favor, deja hablar a los demás”.
“No me gustas, pero haré de ti una reina”
Cuando Letizia aun no era princesa, sino prometida de su hijo Felipe, a Juan Carlos no le quedó de otra que aceptarla, y le dijo una frase no muy amigable “no me gustas, pero haré de ti una reina”.
Fue a partir de entonces cuando la relación entre ambos fue cayendo en picado y llegó a lo que hoy conocemos, una relación nula.