La noticia causó una repulsa generalizada: 220 kilos de carne vencida y lista para ser servida a los comensales del restaurant «Donde La Cuca» de Macul, determinó no sólo el cierre del establecimiento comercial, sino la indignación reflejada en las redes sociales.
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Rosa Oyarce, titular de la Seremi de Salud de la Región Metropolitana, firmó la resolución de cierre de la afamada parrillería ubicada en Avenida Departamental 4400, en horas previas a que el producto cántico se encontraba siendo preparado para ser servido a 400 comensales. «Representaba el 90% del producto disponible para el consumo”, manifestó Oyarce, a través de un comunicado.
“Comer productos cárnicos descompuestos puede generar diarrea, vómitos y dolor de cabeza. Además de presentar cuadros febriles por infección del tracto gastrointestinal, hemorragias digestivas y compromiso de otros órganos. Los síntomas por intoxicación se presentan desde muy leves a severos y esto depende del tipo de bacteria presente en el alimento alterado”, informó la autoridad gubernamental.
La seremi de salud RM ordenó la desnaturalización de la carne, la cual será eliminada y así asegurar que no sea consumida, por el evidente riesgo que representa para la salud.
Para quien se asome por los predios de la red social Twitter, los improperios son variados, muchos de ellos impublicables, en relación al establecimiento comercial, así hacia la figura de su propietaria, Gladys González.
«Yo nunca pierdo» declaró González al Informe Especial de TVN, en una entrevista que la empresaria concedió a la señal oficial, tras la «irregular» compra de unos terrenos municipales en la comuna de Macul.
