Se les denominan Especies Exóticas Invasoras (EEI). Se trata de especies provenientes de otros lugares del mundo que, tras llegar a determinado territorio, generan daños en el ecosistema. El año pasado un estudio del proyecto GEF de Ministerio del Medio Ambiente determinó que 7 de ellas le generaban grandes costos al Estado.
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Ahora se sumó una octava especie que estaría atentando en contra de el abejorro colorado, un espécimen considerado sagrado por el Pueblo Mapuche. El agresor sería el abejorro europeo o bombus terrestris. Este abejorro se caracteriza por su cuerpo negro con bandas amarillas, y por el color blanco del extremo de su abdomen.
Destruyendo a un abejorro sagrado
Aunque fue introducido al país para la polinización de determinados cultivos, su propagación ha provocado el ocaso de las abejas nativas y un problema ambiental de grandes proporciones. Su principal víctima, el abejorro colorado o dulliñ en mapudungun, es un insecto sagrado para el pueblo mapuche, ya que representa la encarnación de los caciques y jefes de familia. De acuerdo a su cosmovisión, el espíritu adopta la forma del moscardón para visitar cada primavera a sus seres queridos.
“Nos hace falta tomar conciencia del daño que ha generado la entrada del abejorro europeo a Chile, tanto por parte de los organismos públicos, empresarios y ciudadanos que consumen los productos polinizados a través de la importación de esta especie. Lo primero que necesitamos es prohibir su ingreso, además de aplicar medidas para controlarlo”, afirma Cecilia Smith, investigadora del Instituto de Ecología y Biodiversidad (IEB) y académica de la Universidad de Los Lagos.
Los otros invasores
La lista de ocho se completa con otras otras siete especies entre animales y plantas. Uno de ellos es el conejo. Éste mamífero se relaciona con daños en plantaciones frutícolas y forestales. Además, genera daños en especies nativas de matorral.
Los castores, otro de los invasores, disminuyen las zonas pastoriles, generando pérdidas en la industria ganadera, así como también atacan a los bosques. Los jabalíes, al igual que el abejorro europeo, estarían afectando otra especie sagrada: se comen las semillas de araucaria.
También afectan a varias especies de insectos y vegetales. Además, transmiten parásitos a la fauna silvestre, contagiando enfermedades.
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Los visones generarían impacto tanto en especies vertebradas como invertebradas. En varias ocasiones se han denunciado ataques de este mamífero a animales de uso agrícola como terneros, gallinas y otros.
Pasando a insectos la chaqueta amarilla ataca a las abejas, afectando a la industria apícola. Así mismo, afectaría a las uvas de la empresa vitivinícola y también generaría impactos en la producción de ciruelas.
Flora
En el caso de especies vegetales, la zarzamora trae consigo efectos positivos y negativos. Si bien su fruto (mora) es bastante útil, las espinas de esta especie afecta otros procesos.
Por ejemplo, afecta los servicios de polinización y frugivoría. Así como la interacción biológica entre plantas y animales nativos como ciertas especies de aves.
El espinillo traería consigo daños similares. Invade cultivos forestales como los de eucaliptos y pinos radiada. Ademas de generar impacto negativo por fijación de N2 del suelo. A su vez, aumentaría los riesgos de incendio forestal. Así mismo invade padres y cultivos agrícolas.
El llamado es, en definitiva, a conciliar la producción y la conservación de las especies nativas. En el caso puntual del abejorro, José Montalva, director de Salvemos Nuestro Abejorro, relata que el Bombus terrestris “llegó a Argentina el año 2006, proveniente desde Chile, y allá también se convirtió en una plaga”.
Respecto a las otras 7 especies, a través del proyecto GEF, ya estarían siendo monitoreadas por las autoridades de Medio Ambiente.
