La bandera de Chile, la misma que salió elegida como la más hermosa del mundo en 1907 en un concurso realizado en una playa de Europa, apareció recién en junio pasado en la primera plana de un diario holandés. Lejos de darnos orgullo, el titular apuntaba a una vergonzosa dirección: «los mejores ladrones del mundo», decía. A sólo dos meses de ocurrido ese episodio, ahora es el turno de un medio inglés el que destaca la habilidad de nuestros compatriotas: The Times.
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En un reportaje que se traduciría como «Lo robado por las bandas se va de regreso a Chile» (Gang’s haul posted back to Chile), el medio inglés se dedica a alertar a los ciudadanos de Londres de agrupaciones de chilenos que ingresan a las casas a robar carteras de marca internacional, dinero y joyas, para enviar las especies robadas a nuestro país.
Nuevo modus operandis
Según indican en ese medio, antes de Navidad de 2017 se registraron más de 200 robos en los exclusivos barrios de Esher y Cobham en lo que sería la «comuna» de Surrey de la capital inglesa. Entre lo sustraído se encontraban carteras Michael Kors y Mulberry, además de prendas de Dior y pañuelos de la marca Chanel. Todo eso sumado a una gran cantidad de dinero y joyas.
Con el objetivo de rastrear el destino de las especies, las autoridades notaron que una gran cantidad de cajas precisamente con estos objetos eran enviados, nada más y nada menos, que a Santiago de Chile. Esto se transformó en un nuevo «modus operandis» pues rompe con la tendencia de reducir las especies en el mismo país.
«Pusimos un mensaje de advertencia en Inmigraciones y en las unidades fronterizas. La gran pregunta era, ¿dónde se están yendo las especies robadas? Así interceptamos una serie de cajas con dirección a Chile. Había cientos de miles de libras en artículos y joyas de alto valor», indicó al medio inglés el detective Tim Court, a cargo de la investigación.
Asimismo, informó que a causa de esta investigación, se había detenido al menos a 36 personas. Por otra parte, en el artículo «Cómo atraparon a los ladrones con las manos en la masa» (How officers caught thieves red-handed) se identificó que cuatro de ellos eran chilenos: Ángelo Bustamente, Alexis Apablaza, Javier Kurte y Gustavo Ahumada Paredes.
Como una violación
Pese a que en Chile el «robo en lugar no habitado» se caracteriza por la capacidad que tienen los delincuentes de dejar muy pocos cabos sueltos para identificarlos, allá todo es diferente: descaradamente dejan huellas y pese a ello no son individualizados.
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Un ejemplo: en uno de los robos dos delincuentes no tuvieron problemas en saltar las paredes de un jardín de una mansión, caminar la larga distancia que existía hacia la casa, llegar hasta la ventana más cercana y luego, decidir quién de los iba a subir hasta ahí. Tras eso, uno se quedó abajo y mediante el método de «la patita» (un empujón hacia arriba usando las manos), hizo que su cómplice pudiera ingresar a la habitación de una menor que no estaba en casa.
«El punto de entrada fue la habitación de mi hija y ahí había barro por todas partes, incluso en las cortinas blancas», indicó al medio inglés una víctima que decidió mantener el anonimato.
«Mi habitación estaba hecha un desastre, habían esparcido los documentos de mi marido, médico del Royal Marsden», agregó la señora robada.
«Te deja la sensación de una gran violación», precisó la víctima.
¿Identificación? No hubo caso: pese a la gran cantidad de huellas dejadas por los delincuentes, estos no pudieron ser individualizados porque ingresaron ahí sin papeles o bien, lo hicieron con documentación falsa.
Intentarán detenerlos en las fronteras
Para prevenir esto, la policía inglesa puso en marcha la «Operación Genio», dedicada exclusivamente a los casos de robo de domicilios y envío de las especies a Chile.
En esa línea, el detective Tim Court advirtió que en octubre volverán a aplicar esta operación pero reforzada: «continuaremos trabajando con las autoridades europeas y chilenas para tratar de identificarlos en la frontera».
Así que si usted es chileno y viaja a Londres desde octubre en adelante, no se asombre si comienzan a hacerle un cuestionario más largo que en ocasiones anteriores.
