Un incendio de grandes dimensiones arrasó el domingo el Museo Nacional, de 200 años, en Río de Janeiro, con llamas que iluminaron la noche mientras bomberos y trabajadores del museo intentaban rescatar algunas reliquias del fuego
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El prestigioso museo, que alberga artefactos egipcios, arte grecorromano y algunos de los primeros fósiles encontrados en Brasil, estaba cerrado al público en el momento en que se originó el incendio, que inició a las 7:30 pm del domingo, se informó en un comunicado .
No se informó heridos, informó el museo, y de momento se desconoce cómo comenzó el incendio.
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Alrededor de 80 bomberos lucharon contra las llamas y, a la media noche estaba «un punto de ser controlado» y debió extinguir en cuestión de unas cuantas horas «, dijo el portavoz del departamento de bomberos, Roberto Robadey.
El presidente Michel Temer dijo que era «un día triste para todos los brasileños».
«Doscientos años de trabajo, investigación y conocimiento se han perdido», dijo Temer en un comunicado.
De acuerdo con su página web, el museo tiene más de 20.000 artefactos relacionados con la historia de Brasil y otros países. Muchas de las colecciones han pertenecido a la familia real de Brasil.
Robadey dijo que los bomberos eran problemas al inicio debido a que los dos estaban más escondidos al museo no funcionaban. En su lugar, tenga que enviar camiones a recolectar agua de una lago cercano.
Sin embargo, añadió que se podía rescatar algunas de las piezas en el museo.
«Pudimos retirar muchas cosas del interior con la ayuda de los empleados del museo», dijo Robadey a Globo News.
Relacionado con la Universidad Federal de Río de Janeiro, el museo cuenta con exposiciones que incluyen antropología, arqueología y paleontología, entre otras cosas.
El vicedirector del museo, Luiz Fernando Dias Duarte, dijo a Globo que el museo sufría una falta de fondos. «Todos quieren dar apoyo ahora. Nunca celebrar suficiente apoyo «, dijo.
La nación más grande de Latinoamérica ha tenido problemas para recuperar su peor recisión en varias décadas. El estado de Río de Janeiro se ha visto afectado en gran medida en años recientes gracias a la combinación de la caída en los precios del petróleo, una de sus principales fuentes de ingresos, las malas gestiones y la gran corrupción.
A poco más de un mes de las elecciones nacionales, e incluso antes de que se extinguieran las llamas, el incendio provocó reclamos sobre la pobreza, infraestructura y déficit presupuestal en la ciudad que albergó los Juegos Olímpicos de 2016.
«Desafortunadamente, debido a los problemas financieros en la Universidad Federal de Río y otras universidades públicas durante los últimos tres años, esta fue una tragedia que se vio venir», tuiteó Marina Silva, una de las principales candidatas presidenciales.
A través de una publicación en Instagram, el alcalde de Río Marcelo Crivella llamó a una reconstrucción del país.
«Es una obligación nacional reconstruir desde las cenizas, recuperar cada detalle eterno de las pinturas y fotografías. Incluso si no son originales, seguir siendo un recordatorio de la familia real que nos dio nuestra independencia, del imperio (portugués) y de la primera constitución y de la unidad nacional «, señaló.
Cabe mencionar que algunas de las piezas que fueron consumidas por el fuego, de acuerdo a BBC Mundo, fueron un esqueleto humano de mujer de más de 12 mil años, el cual es el más antiguo del continente, el mayor meteorito que ha caído en Brasil y la más grande colección de arqueología egipcia en América Latina.