La Unión Nacional de Pensionados (Unap) usó la ironía como arma para mostrar su malestar por el aguinaldo que recibieron para Fiestas Patrias. Esto porque la agrupación que congrega a los jubilados del país se acercó a las dependencias del Ministerio de Hacienda en Santiago Centro para hacer una curiosa intervención: entregarle un cheque «gigante» por 18 mil pesos, mismo monto del beneficio que recibieron, al ministro Felipe Larraín.
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El cheque medía más de un metro de largo, aparecía emitido por el Banco de la Miseria, y venía con la firma de Mickey Mouse. Junto a eso venía una carta en donde le explicaban al ministro las razones de su malestar: el bajo monto del aguinaldo, que consideraron «una vergüenza», y la marginación de más de un millón de adultos mayores del beneficio.
La Asociación Gremial Unap se dirige a Ud. (ministro Larraín) para manifestar nuestra molestia por el anuncio del Gobierno de entregar un paupérrimo Aguinaldo de Fiestas Patrias. O sea, los pensionados, jubilados y montepiadas somos considerados como ciudadanos de tercera clase, y no se respeta la Constitución Política, artículo 19, inciso 2º -«somos iguales ante la ley»-(…) Para nosotros no se aplica ese artículo.
En el texto hacen hincapié en que, los funcionarios públicos y municipales reciben cerca de 70 mil pesos para el dieciocho, mientras los pensionados no perciben ni la mitad de ese monto. «Existe una diferencia bien marcada en contra de este sector etario, que se siente una vez más pasado a llevar. Pensamos que usted nos puee ayudar a futuro, como ministro de Hacienda, en buscar una solución», reza el documento firmado por Francisco Iturriaga, presidente de la asociación.
