Moderado, tibio, austero. Esas palabras se usaron para describir al nuevo presupuesto fiscal para 2019 anunciado ayer por el Presidente Sebastián Piñera en cadena nacional. Esto porque las arcas fiscales contarán el próximo año con 73.470 millones de pesos, lo que representa un crecimiento del 3,2% respecto del año anterior, siendo el incremento más bajo desde 2011.
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Ante las voces que tildaron al nuevo presupuesto como demasiado recortado, el ministro de Hacienda Felipe Larraín salió hoy a defenderlo:“Es un aumento responsable. Yo lo calificaría así porque, a la vez de avanzar en cumplir con el programa de gobierno que nos hemos trazado en estos cuatro años, cumple con los compromisos fiscales que hemos asumido”, señaló.
El presupuesto es otra de las muestras de la promesa de austeridad económica que anunció Piñera a inicios de su mandato, estrategia que busca reducir la deuda pública del país a través de un menor gasto fiscal.
“Si queremos que la deuda pública no siga creciendo o doblándose cada cuatro años como acaba de ocurrir en los años anteriores, tenemos que moderar el crecimiento del gasto público y ese el desafío que tenemos”, agregó, aprovechando, como es costumbre, de criticar a la gestión económica del gobierno anterior de Michelle Bachelet.
Los detalles
Según ha expresado el gobierno, el énfasis del presupuesto 2019 estará en seguridad, infancia y las regiones. Además de destinar fondos para reemplazar el Sename por dos instituciones nuevas y de dedicarle especial atención a la modernización de Carabineros, el líder de la cartera fiscal agregó que “todas las regiones van a ver aumentos en sus presupuestos”.
Sin embargo, el detalle del presupuesto aún no se conoce. Larraín afirmó que «de aquí al viernes» presentarán el proyecto.
