El termómetro en Nueva York marcó 20°C a las 11:00, hora local en que el Presidente Sebastián Piñera intervino en la 73° Asamblea General de la ONU, tras un retraso de 60 minutos respecto al plan original.
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Pese a que los rayos de sol entibiaban a ratos, aún quedaban vientos de la tormenta que afectó este miércoles al Mandatario: las palabras de Nicolás Maduro acusando a Chile de formar parte del atentado con drones de agosto pasado.
Pese a que el Jefe de Estado no quiso responder directamente a esa acusación, sí fue duro con su homólogo caribeño: lo volvió a acusar de ambicioso e insensible, como lo hizo el miércoles, pero además le advirtió que desconocerá su cargo si continúa en el poder, basándose en las últimas elecciones de Venezuela del 20 de mayo pasado.
«Yo me pregunto, ¿cómo puede ser un presidente tan ambicioso, tan insensible que está dispuesto a generar ese grado de dolor y sufrimiento a su pueblo para retener el poder?», dijo en el salón plenario, donde otros mandatarios también estaban presentes.
Mientras hablaba, escuchaban atentos dentro del salón su esposa Cecilia Morel, junto al ministro de Salud, Emilio Santelices y otros parlamentario de la delegación chilena. Todos escucharon cuando Piñera volvió a arremeter: declaró que si Maduro sigue en el poder, será de forma ilegítima.
«Chile no reconoció la legitimidad de las elecciones presidenciales recientes en Venezuela», precisó el Mandatario y agregó que «por tanto, no reconocerá la legitimidad del nuevo gobierno que surge a partir de esas elecciones».
Estas palabras fueron totalmente respaldadas por la delegación chilena que acompañó al Mandatario. «Si bien Maduro llegó al poder por la vía democrática, finalmente devino en un dictador. Lo que tiene que haber en Venezuela es el restablecimiento de garantías fundamentales para las personas», dijo a Publimetro el senador Guido Girardi (PPD).
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Por su parte, el diputado Fernando Meza (PR) agregó que «compartimos el diagóstico que hizo el Presidente». Ello pues tuvo la oportunidad de trabajar en la frontera de Colombia con Venezuela donde «pude ver en directo el drama humanitario del éxodo».
Paulina Núñez, por su parte, aclaró que el Mandatario «tomó la voz de aquellos venezonalos que han sido acallados y pudo reconocer que se están violando los Derechos Humanos».