Cuando en la Casa Blanca el Presidente Sebastián Piñera sacó una bandera de EEUU modificada para que se viera también la de Chile, el murmullo de parte de los periodistas internacionales que se encontraban en el salón oval aumentó mientras los flashes se multiplicaron por miles.
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Y si bien este hecho llamó la atención de toda la prensa, la entrega de este curioso papel no fue lo único que se hizo en Washington, y así lo hizo saber el Mandatario, quien anticipó que Trump le preguntó por la demanda marítima de Bolivia en la Corte Internacional de Justicia de La Haya y que, incluso, invitó al norteamericano a visitar Chile para 2019.
Demanda marítima
«Hablamos de temas que le interesan a todo el continente, como es el caso de Bolivia, Nicaragua y Venezuela», dijo Piñera tras salir de esta reunión, que duró una hora con 15 minutos.
Estaban en ese análisis cuando de pronto Trump le preguntó a Piñera sobre la demanda marítima de Bolivia a Chile y que este 1 de octubre registrará un nuevo hito con la lectura del fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
«En algún momento el presidente nos preguntó por Bolivia. Ahí, en forma muy breve le planteamos la situación que está siendo conocida en la CIJ y que el resultado lo conoceremos el próximo lunes», sostuvo el Mandatario.
Esperar fallo en grupo
Sobre la decisión del canciller Roberto Ampuero de recibir la lectura del veredicto en La Moneda y no en La Haya como había anunciado anteriormente, Piñera aseguró que «nuestra visión es que los tres poderes del Estado -el Presidente de la República, el presidente de la Corte Suprema y los presidentes de la Cámara de Diputados y el Senado, recibamos juntos el fallo».
Ello se da porque si Ampuero está en Santiago será más fácil para el Gobierno unificar posturas ante el fallo.
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Invitación
Por último, Piñera también extendió una invitación a Donald Trump para visitar nuestro país.
«Invitamos al presidente Trump a visitar Chile para participar de la cumbre de Apec que tendremos en 2019», indicó Piñera.
Por último señaló que esta fue «una reunión profunda, directa y franca» y que hubo buenos dividendos del encuentro.