El ex juez español Baltazar Garzón, pieza clave de la detención de Augusto Pinochet en Londres durante un viaje que realizó a la capital inglesa en 1998, criticó al Presidente Sebastián Piñera a 20 años del histórico momento en que el entonces senador estuvo a punto de enfrentar un juicio por crímenes cometidos durante la Dictadura Militar, incluyendo figuras como genocidio, terrorismo internacional y torturas.
PUBLICIDAD
En entrevista con Chilevisión Noticias, Garzón pudo ver en una pantalla un discurso de campaña presidencial de Piñera en 1999 donde lo increpaba directamente a él, acusándolo de intentar imponer la justicia española por sobre la chilena en un plan «colonialista».
Piñera respaldó a Pinochet
«Las condiciones de salud del senador Pinochet son muy complicadas y todos los conocemos», apareció diciendo el actual Mandatario en el video que le mostraron al ex jurista español.
«Queremos decirle al juez Garzón que lo entienda muy bien. Chile ha sido, es y será siempre un país soberano”, agregó Piñera, entonces senador de Renovación Nacional y con aspiraciones de llegar a las presidenciales de ese año, pese a que la derecha más dura se había abanderado por Joaquín Lavín de la UDI.
«Ninguno de nosotros está dispuesto a volver a ser colonia de ningún país del mundo”, agregó el actual Presidente en ese discurso.
Respuesta de Garzón
Ante tales palabras, Garzón respondió que «Yo estoy de acuerdo con él. Sigue siendo un país libre y soberano, salvo cuando estuvo bajo la dominación española. Pero es que esto no se trata de eso».
Refiriéndose al video, agregó que «No es cuestión de colonización, es cuestión de Justicia. No he oído ninguna palabra de ese mitin del señor Piñera donde se refiriera a las víctimas».
PUBLICIDAD
Fue en ese momento en que Garzón cuestionó al Presidente Piñera. «¿Qué esfuerzos ha hecho él para que la Justicia se implemente, llegue hasta al fondo, la verdad responda?».
Cuestionó a Jack Straw
Cabe mencionar que con el tiempo los intentos del ex juez español para llevar a Pinochet a la Justicia no rindieron frutos, todo luego que desde Inglaterra, el ministro del Interior de ese país, Jack Straw, indicara que el ex dictador no estaba en condiciones mentales y de salud de enfrentar un juicio.
Fue así como el 3 de marzo Pinochet llegó a Chile y apenas bajó del avión, dejó atrás la silla de rueda y caminando saludó a los militares que lo esperaban en el aeropuerto en Santiago, donde se entonó «Los Viejos Estandartes» para rendirle honores. Luego que esta escena que diera vuelta al mundo, el ministro Straw dijo que se sentía engañado.
Consultado al respecto, Garzón tampoco creyó esa tesis. «Fue un acuerdo político, claramente», respondió. Aseguró que él revisó los informes médicos junto a otros siete especialistas y todos coincidían que en base a esa información, Pinochet sí podría enfrentar un juicio.
Amenazado
En la misma entrevista, el ex juez indicó que hubo un plan donde amenazaron a su familia por este caso, que terminó luego de 503 días de litigio interncional.
Asimismo, resaltó lo irónico que resultaba para él que muchas autoridades de Gobierno de la época, bajo la administración de Eduardo Frei Ruiz-Tagle, tuvieran que defender a Pinochet e intentar conseguir su liberación aún cuando ellos o sus familias habían sufrido problemas asociados a la dictadura, como el exilio.