Según la encuesta Casen 2017, los adultos mayores (60 y más) ya representan el 19,3% de la población, lo que equivale a casi 3,5 millones de personas.
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Desde la mirada del consumo, actualmente estas personas cuentan con mayor acceso al crédito y tienen niveles de endeudamiento mayores que en décadas anteriores. Según el XX Informe de Morosidad de Personas de la Universidad San Sebastián y Equifax, el 14,4% de los adultos mayores (60 años y más) se encuentra en situación de endeudamiento moroso (572.197 personas), con un promedio de mora sobre el millón cuatrocientos mil pesos.
A su vez, 7,2% de los consumidores de la tercera edad hacen alguna consulta al Sernac y 5,3% realiza un reclamo. Las principales consultas se refieren a cobros por seguros no contratados, y los reclamos por cobros indebidos.
Por otra parte, según la Radiografía del Consumidor encargada por este organismo, 64% de los consumidores de 61 años o más, se sienten vulnerables en materia de consumo. Además, son los que menos reclaman (68% declara no hacerlo); 42% dice tener bajo nivel de información sobre sus derechos como consumidor y un 14% indica que se ha sentido discriminado al comprar o contratar servicios.
Ante estas cifras es que el Sernac lanzó este martes una campaña de educación financiera enfocada en esta parte de la población. Para el director del servicio, Lucas del Villar, estas cifras refuerzan la necesidad de que los adultos mayores conozcan sus derechos para que se atrevan a ejercerlos.
“Como consumidores, todos tenemos los mismos derechos”, se llama la iniciativa lanzada por el Sernac, durante una actividad desarrollada en el Centro Cultural del Adulto Mayor en el Parque Quinta Normal, junto a un grupo de personas de la tercera edad.
Durante el encuentro, los adultos mayores participaron del taller “A buen pagador”, cuyo objetivo es generar conocimientos y aprendizajes sobre el manejo de los diversos instrumentos financieros.
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Asimismo, la comediante Jenny Cavallo realizó un stand up donde abordó de manera divertida, temas relacionados con la educación financiera, con la moraleja de la relevancia del ahorro y de tomar decisiones de consumo a consciencia.
La campaña también incluye folletería, redes sociales y cápsulas radiales además de talleres, charlas de educación financiera y guías educativas que se entregarán a los adultos mayores en distintas actividades.
Del Villar recalcó que las personas mayores, al igual que todos los consumidores, tienen derecho a conocer las condiciones relevantes de los productos y servicios que contratan. Por ejemplo, el otorgamiento de una tarjeta de crédito debe basarse en condiciones objetivas, previamente informadas y en ningún caso pueden ser condiciones arbitrarias para los consumidores.
“La edad no puede ser por si sola una condición objetiva para, por ejemplo, no entregar o renovar un producto financiero, pues también, se debe considerar el patrimonio, su capacidad de pago, entre otros aspectos”, enfatizó la autoridad.
Asimismo, Del Villar indicó que las empresas tienen una tarea importante con las personas mayores, no sólo respetando la Ley del Consumidor, sino también promoviendo buenas prácticas dirigidas a este grupo etareo. “Las empresas que quieran diferenciarse, deberán considerar que el país tiene cada vez más personas mayores, independientes, autónomas, y que son capaces de, por ejemplo, responder por un crédito”, indicó Del Villar.