Una serie de explosivos enviados a las viviendas de Hillary Clinton, del ex presidente Barack Obama,el millonario George Soros, el ex director de la CIA John Brennan, el ex fiscal general Eric Holder, la cadena de noticias CNN y dos representantes demócratas, Deborah Wasserman y Maxine Waters fueron interceptados por las autoridades esta semana, en un inusual intento de violencia contra figuras despreciadas por sectores de derecha.
PUBLICIDAD
Todos los artefactos parecen venir de la misma persona, informó John Miller, director del departamento antiterrorista de la Policía de Nueva York.
En CNN fueron hallados dos paquetes, uno era efectivamente un explosivo y el otro contenía un polvo blanco. Según las imágenes filtradas por medios norteamericanos, uno de los correos estaba dirigido al ex director de la CIA John Brennan, invitado frecuente en la cadena de noticia y crítico de la administración Trump, y tenía como emisora a la legisladora Wasserman.
PHOTO: CBS News has obtained a photo showing the explosive device sent to former CIA Director John Brennan at the CNN bureau in New York. The package has Democratic Rep. Debbie Wasserman Schultz's Florida office as the return address. https://t.co/e2hhbMxlJc pic.twitter.com/KPXvtz5IR7
— CBS News (@CBSNews) October 24, 2018
Todos los dispositivos parecían ser bombas de tubo de un tipo improvisado, dijeron Miller junto con otros funcionarios en conferencia de prensa en Nueva York.
Según informan medios estadounidenses, la bomba enviada a la casa del millonario Soros sería una «pipe bomb» (bomba de tubería), un artefacto que tiene una pequeña cantidad de explosivo, pero con una capacidad de detonación moderadamente potente debido a la presión generada por el tubo metálico, cuyos fragmentos se convierten un proyectiles.
Un oficial indicó a CBS Miami que al menos uno de los explosivos parecía contener proyectiles, incluidos fragmentos de vidrio.
PUBLICIDAD
El Servicio Secreto, la policía y el FBI se encuentran investigando la procedencia de los “paquetes sospechosos”. Hasta el momento nadie ha reivindicado los hechos.