La reclusa argentina de 20 años Nahir Galarza , quien fue condenada a prisión por matar a su novio el 29 de diciembre de 2017, fue protagonista de una pelea con otra reclusa llamada Griselda Bordeira en el Penal de Mujeres de Paraná, Entre Ríos.
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La joven que se encuentra hoy cumpliendo cadena perpetua por asesinar a Fernando Pastorizzo con la pistola de su padre policía, ya había tenido situaciones de tensión con amenazas de muerte de parte de Griselda Bordeira (ex sargento condenada por vínculos con una banda de narcotráfico) con quien compartía pabellón.
El conflicto explotó el pasado fin de semana con la provocación de la otra reclusa que colmó a Galarza y la hizo reaccionar de forma violenta. Mientras la joven estaba escuchando música con auriculares, Bordeira hizo un comentario que la hizo reaccionar, terminando la discusión en amenazas de muerte .
Luego de que las autoridades de la penitenciaría separaron a las internas, Bordeira fue derivada al pabellón de madres para mantenerse lejos de Galarza.