El gobernador del estado de Río de Janeiro, Luiz Fernando Pezao, fue arrestado en su residencia oficial el jueves bajo la sospecha de que recibió unos diez millones de dólares en sobornos. Se suma así a una serie de altos funcionarios políticos arrestados por corrupción.
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La operación, llamada «Boca del Lobo», se centra en el presunto lavado de dinero, delincuencia organizada y sobornos en la oficina del gobernador, explicó la policía en un comunicado. Pezao fue vicegobernador de 2007 a 2014 y es gobernador desde hace cuatro años.
La procuradora Raquel Dodge dijo a la prensa que Pezao está acusado de organización criminal, lavado de dinero y corrupción, pero no entró en detalles. El abogado del gobernador y los voceros del gobierno de Río no respondieron de momento a un pedido de declaraciones.
Pezao, cuyo mandato termina el 31 de diciembre, se suma a una larga lista de políticos prominentes implicados en el caso conocido como «Autolavado», una investigación sobre los sobornos pagados por una gran constructora y otras empresas. Desde su inicio en 2014, decenas de empresarios y políticos fueron condenados y encarcelados por casos relacionados.
El arresto de Pezao se produjo luego del acuerdo judicial alcanzado por Carlos Miranda, un antiguo asesor del exgobernador Sergio Cabral, el jefe de Pezao de 2007 a 2014. Cabral fue arrestado en 2016.
Miranda declaró que Pezao recibía miles de dólares en sobornos cada mes.
Dodge dijo que la policía federal sigue buscando los fondos malversados.
