Este miércoles la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (Sbif) presentó el Informe de Endeudamiento 2018, en el que no se notaron mayores cambios respecto de versiones anteriores.
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El reporte da cuenta que los indicadores de endeudamiento de los clientes bancarios aumentaron en el último año, siguiendo la trayectoria observada en años recientes. Así, a junio de 2018 el nivel de deuda representativo, definido a partir de la mediana fue de 3,2 millones de pesos, registrando un aumentó en 7,3% real en comparación a igual fecha de 2017 (2,9 millones de pesos).
En paralelo, los indicadores de carga financiera, es decir, el porcentaje que las personas destinan de su ingreso a pagar deudas llegó a 25,7% y apalancamiento (el número de ingresos mensuales que un deudor tendría que destinar para saldar sus obligaciones financieras) alcanzó 7,5 veces, superando a los observados doce meses antes (23,7% y 5,2 veces, respectivamente).
Pese a estos aumentos, el superintendente Mario Farrén, sostuvo que «no se observan cambios demasiados importantes respecto de lo que se venía reportando en los informes anteriores.
Por otra parte, el 22,7% de los deudores totales tiene una carga financiera superior al 50% de su ingreso mensual, cifra estadísticamente menor a la correspondiente a junio de 2017 (23,5%). Al respecto, la autoridad dice que si bien este dato no representa un riesgo para el sistema financiero local, si recordó que «lo que se aconseja es que las personas no debieran destinar más del 25% de su ingreso mensual líquido al pago de deuda».
Factor vivienda
Según este informe, el crecimiento en el monto de la deuda registrada está influenciado fuertemente por los nuevos deudores que ingresaron en el periodo en el producto de crédito hipotecario con respecto a los deudores que permanecen desde el reporte anterior. De hecho, el segmento entre 35 y 40 años es el que exhibe mayor nivel de deuda ($5.773.802), mostrando una alta correlación con decisiones de compra de vivienda.
Relacionado con lo anterior, la carga financiera alcanza su máximo (29,2%) en el segmento de población con ingreso entre $1,2 y $1,7 millones , mientras que el apalancamiento máximo (13,1 veces el ingreso) se alcanza en el segmento de población cuyas rentas se ubican entre $1,7 millones y $2,6 millones de pesos.
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«Este grupo, al tener ingresos más altos, tiene mayor ingreso disponible, tiene cubiertas sus necesidades básicas de consumo y puede dedicar un mayor monto a pagar deuda», explicó la autoridad, quien añadió que esto coincide con que las tasas de interés han estado históricamente bajas.
Preocupa deuda de jóvenes y adultos mayores
Por otro lado, el reporte de la Sbif alerta sobre los datos de endeudamiento de los más jóvenes y más adultos. Los segmentos que exhiben índices de morosidad superiores a la mediana (3,9%) son los de menores ingresos, los adultos mayores (más 65 años) y los jóvenes (menores de 30 años). Pese a ello, los segmentos con mayores índices de morosidad presentan, como contrapartida, menores índices de apalancamiento, es decir, que requerirían de un menor número de veces de ingresos para poder cumplir con el total de lo que deben.
Deudas sin pagar
En tanto, a junio de 2018 existían 866.160 deudores bancarios con deuda impaga de uno o más días, donde el 10,3% presenta mora mayor a 90 días. Los deudores morosos representan el 18,7% del número total de deudores bancarios. La deuda mediana impaga de los deudores morosos es de $124.618, lo que corresponde a un 3,94% de la deuda mediana total (cifra levemente menor a la observada a igual fecha del año anterior, 3,99%).