Hermes Soto no quiso renunciar. Pese a que el Gobierno le pidió dar un paso al costado, el general director de Carabineros decidió expresar su negativa a dejar el cargo. No fue lo único: informó al Presidente Piñera que si se iba él, también lo tendrían que hacer otros 10 generales.
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Y así lo informó el Mandatario. «Le he pedido la renuncia al general Hermes Soto Isla, general director de Carabineros, para lo cual hemos iniciado los procedimientos correspondientes», precisó.
«Quiero también informar que en el día de hoy, el general Soto me ha informado que ha dado curso a la renuncia de 10 generales de Carabineros de Chile, con el propósito de facilitar la conformación de un nuevo Alto Mando», agregó Piñera.
Complicado proceso
Pero esta negativa implica un nuevo dolor de cabeza: el general no se irá hasta que no sean informadas la Cámara de Diputados, el Senado y la Contraloría General de la República. ¿Por qué tanto? Pues así lo ordena el artículo 104 del capítulo XI de la Constitución del país: el cargo de Soto es inamovible y para sacarlo de ahí, hay que recurrir a un decreto supremo fundado.
«Lo que indica la Constitución, es que para dar curso a esta remoción, se debe informar al Congreso. La Cámara se da por informada cuando se convoca a una sesión, que debe nacer cuando llega un oficio», indicó a Publimetro Jaime Mulet, vicepresidente de la Cámara de Diputados.
La complicación estuvo en que el Congreso justamente sesionó por última vez este 2018 ayer, sin haber recibido el oficio en cuestión.
«En estas circunstancias hay que apoyar al presidente: todos los parlamentarios tenemos que respaldarlo», agregó Mulet aún cuando la convocatoria no había sido extendida.
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Razones
Pero, más allá de esta caótica salida, ¿qué fue lo que detonó todo? Sin duda, los videos. Ya desde el miércoles, al enterarse de la existencia de estos archivos, el padre de Camilo Catrillanca, Marcelo, apuntó a que Soto «debe dar un paso al costado».
No fue el único: varios parlamentarios de oposición también pidieron su salida y, a modo de presión al Gobierno, analizaron incluso una acusación constitucional contra el ministro del Interior, Andrés Chadwick.
Problema de liderazgo
A eso, hay que agregar un antecedente más: la imagen de liderazgo. Según Hugo Gutiérrez (PC), existió un problema que Soto no pudo superar.
«Él nunca tuvo una autoridad moral sobre Carabineros y eso sin duda fue una debilidad que arrastró hasta el último día de su mandato. Nunca fue considerado como un general director por sus pares», expresó Gutiérrez.
Y el diputado tiene una relación bien directa con Hermes Soto: él fue quien filtró la hoja de vida cuando llevaba sólo horas en el cargo de director de Carabineros, donde se indicaba que en su juventud, el uniformado fue castigado por visitar una «casa de lenocinio».
«Nunca debió haber asumido en ese cargo por la denuncia misma que hice yo: entregué antecedentes que demostraban de manera categórica que él fue sancionado por darle protección a un prostíbulo a cambio de favores sexuales. Yo creo que esa sola demostración hacía inviable su designación», sentenció el parlamentario.