Ayer fue el primer día en su cargo para el nuevo director general de Carabineros Mario Rozas. Se fotografió con la gente en la calle y se reunió con el subsecretario Rodrigo Ubilla.
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La máxima autoridad de la policía uniformada analizó el complejo momento por el que atraviesa Carabineros de Chile, después de los casos del «pacogate», la «Operación Huracán» y la reciente muerte de Camilo Catrillanca.
«Esto pasa cuando uno no observa bien. Creo que faltó observación, faltó ejecutar algunas acciones, se dejaron de hacer algunas otras, por lo tanto, eso es un dejar hacer; ahí no tuvimos la visión para poder interactuar de forma oportuna», señaló a El Mercurio.
Sobre el general Soto y su corto periodo al mando de Carabineros, Rozas prefirió no emitir opiniones, eso sí acepta que fue parte de su gestión. «El cumplió con todos los requerimientos que se le plantearon y, ciertamente, se logró bajar algunos índices de victimización».
Planteó que la comunidad espera que se tomen medidas drásticas para erradicar las malas practicas dentro de la institución. Particularmente en el operativo que resultó muerto Camilo Catrillanca, sostiene que faltó conducción y liderazgo.
Al ser consultado de que haría en la situación que el Presidente le pidiera la renuncia, Rozas mostró matices. «Es una situación que se puede dar, pero de buenas a primeras no tengo una respuesta porque tendría que estar dentro de un contexto. De acuerdo al contexto en que se desarrollen los hechos, claro podría meditar una u otra postura».
En cuanto a lo sucedido en el operativo llevado a cabo en Ercilla, Rozas se mostró decidido: «lo que queremos es determinar la responsabilidad de quienes participan y reconocer cuáles fueron nuestras fallas para poder corregirlas».
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Aprovechó la oportunidad para expresar las más sinceras condolencias por la muerte de Camilo Catrillanca, asegurando que aportará antecedentes para esclareces la verdad de los hechos.
Sin embargo analiza la posibilidad de que el Gope vuelva a la zona de conflicto en La Araucanía «ciertamente se observa, evalúa y se van realizando correcciones en el camino, y después de una evaluación intensa se mantendrá, modificará, reacondicionará para que se potencie la labor de prevención y control», concluyó.
