La llegada de la tecnología, primero, la flota de 60 taxis eléctricos, después, y el arribo masivo de buses con entrañas de litio, por último. Durante el año pasado, varios fueron los hitos que marcó la movilidad eléctrica en Chile.
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Sin embargo, y pese a que el mercado de autos eléctricos ya suma más de 400 autos moviéndose por el país, sin contar los 200 buses que ya estarán recorriendo Santiago, la electromovilidad sigue teniendo un talón de aquiles: la operatividad.
Por eso, ayer se marcó otro hito: la primer carretera eléctrica de carga rápida del país. Este jueves, La ministra de Energía, Susana Jiménez -junto al respaldo de las carteras de Transporte y Medio Ambiente-, fue la encargada de dar inicio a la nueva red Copec Voltex. ¿Qué implica eso? Un trazado de casi 730 kilómetros desde Santiago a Concepción, y que estará unido por 23 electrolineras de última generación.
“Esta nueva red de electrolineras es muy importante para el país porque permitirá circular entre Valparaíso y Biobío con vehículos eléctricos. Este año se llegará a más de 150 cargadores públicos en Chile, cifra tres veces superior a los 44 que había en 2018″, relató la ministra Jiménez.
Se prevé que las electrolineras estén plenamente operativas el 31 de enero, y de la veintena de estaciones inauguradas, 19 corresponden a carga rápida. ¿Qué implica eso? Al comprar un auto eléctrico, éste viene con un adaptador de corriente hogareño de 220 volts. El problema es que la batería se carga en entre 7 o 10 horas.
junto con eso, hay otros sistemas de 11 kilowatts que completan la carga de las baterías de litio de un vehículo eléctrico por unas cinco horas. Esos tiempos hacen ilógico un viaje de 700 kilómetros, tramo que tardaría dos días en completarse. Por eso la nueva red de Copec marca un hito: cada tótem soporta una carga de 50 kilowatts de potencia, por lo que los autos pueden cargar el 80% de la batería en 20 minutos.
Las electrolineras pasarán por Viña del Mar, Valparaíso, Santo Domingo, San Fernando, San Rafael, Maule, Parral, San Carlos, Chillán y Concepción, entre varios otros puntos intermedios. Con ello, al fin quienes opten por comprar un auto eléctrico tendrán las condiciones de infraestructura para ir a darse un paseo por el sur.
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Y si bien la electro carretera aún no tendrá una alta demanda, sí es una apuesta a futuro. Arturo Natho, gerente general de Copec, se refirió a las proyecciones a 2050 sobre electromovilidad en Chile. “Tendremos cinco millones de autos eléctricos. Es decir, un salto exponencial. Y no sólo eso: buses, las bicicletas y los scooters, se han empezado a tomar cada rincón de nuestras ciudades”.
Hernán Olmi, académico de la Facultad de Ingeniería de la U.Central, valora la llegada de la red. Sobretodo, dice, por los tiempos de carga que podrán acercarse mucho más a los tiempos de las gasolineras tradicionales. «Pasarse al auto eléctrico suena súper bien, pero hacerlo aún tiene complicaciones operativas importantes. La gente cambiará de tecnología cuando la tecnología sea más confiable, y no lo digo solo por la red de autonomía, sino que por el precio de los autos».
Cómo se cargará la batería
Del total de electrolineras públicas en Chile, casi el 49% están ubicadas en la Región Metropolitana. Junto a eso, de los 44 puntos de carga, sólo 10 cuentan con carga rápida de 50kW.
En ese escenario, la red de Copec será un alivio para los poco más de 400 dueños de autos eléctricos que podrán llegar a Concepción sin el miedo de quedar sin batería. Sin embargo, la red no servirá a cualquier auto, si no que sólo a quienes soporten la tecnología para resistir el alto flujo de potencia.
De todas formas eso no sería problema, pensando en que la conversión de combustión interna a corriente eléctrica recién se está dando ahora. En 2018, se comercializaron en Chile 197 de estos vehículos.
¿Cuánto cuesta cargar el vehículo en una electrolinera privada? Depende mucho de la capacidad de cada auto y su flujo de carga, pero el precio sería al menos un 60% más bajo que llenar un estanque de gasolina. Desde Copec dicen que además tendrá adaptadores para las motocicletas, y todo acompañado en un tótem de última generación.
Adicionalmente, se contempla la instalación de un punto de carga ultrarrápido en la capital (175kW), el primero de Sudamérica, con tecnología de última generación que permitirá a los autos que tienen baterías más potentes, cargar en tan solo ocho minutos.