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La revista Foreign Policy aseguró que el gobierno de Estados Unidos intentó evitar que la ex presidente Michlle Bachelet asumiera como Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos.
De acuerdo a la publicación, la administración de Donald Trump acusó a la otrora gobernante de entregar declaraciones «preocupantes» sobre Israel, por lo que habría lanzado una campaña para que no tomara dicho cargo.
En ese sentido se sindica que la en ese entonces embajadora norteamericana en la ONU, Nikki Haley, envió un documento al secretario general de la organización António Guterres el pasado 6 de septiembre, en donde da a conocer las objeciones de su país y de Israel al nombramiento de Bachelet.
De igual manera, alegó que no se habrían considerado las preguntas norteamericanas por las calificaciones políticas de Bachelet.
Por último, en el artículo se explica que si bien Estados Unidos no manifestó explícitamente su negativa al nombramiento de la ex presidenta, si habría dejado en claro su oposición.
