Esta mañana la subsecretaria de Prevención del Delito, Katherine Martorell, y el director nacional de Orden y Seguridad de Carabineros, general Ricardo Yáñez, entregaron el balance de la última ronda extraordinaria realizada por la policía uniformada.
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Esta operación policial, la segunda del año, se desarrolló entre el jueves 31 de enero y el domingo 3 de febrero, contó con casi 15 mil funcionarios de Carabineros desplegados por distintos puntos del país y dejó un total de 4.586 detenidos.
Al respecto, la subsecretaria Martorell señaló que «el resultado de la ronda fue muy positivo. Tenemos cerca de cinco mil detenidos, pero de ellos el 79% son delitos flagrantes. Eso habla de la efectividad de Carabineros en la calle, de evitar o frustrar delitos».
El detalle de las personas detenidas indica que 3.327 fueron sorprendidos en flagrancia y 1.259 fueron aprehendidos por ordenes de detención vigente, mientras que el 57,2% de los casos, es decir 2.625 detenidos, pasará ante un tribunal para control de detención, 1.685 quedaron apercibidos y 122 fueron trasladados directamente a un recinto penal debido a una orden pendiente.
Por su parte, el general Yáñez afirmó que «este es un servicio extraordinario y un servicio adicional de nuestro personal que en terreno logra hacer esta prevención, porque previenen, entre otras cosas, fiscalizando».
Respecto a la decisión de desplegar gran cantidad de funcionarios en el litoral, Yáñez dijo que «en este periodo del año muchas personas se trasladan de los centro urbanos a los lugares de descanso o balnearios, no obstante que esta ronda tuvo carácter nacional».
Durante esta ronda extraordinaria se realizaron 210.749 controles policiales, incautándose en total 114,1 kilos de drogas y 6.810 plantas de marihuana, además de 156 armas de distintos tipos.
