El asesinato del comunero mapuche de la comunidad de Temucuicui, Camilo Catrillanca, conmocionó al país. Desde la fecha del evento, 14 de noviembre, los ojos estuvieron puestos sobre el Comando Jungla. Una serie de hechos tras una confusa muerte con entes del Estado involucrados fue seguida de fuertes movilizaciones.
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La aparición tardía de videos del helicóptero del momento exacto de la muerte. La filtración de datos que involucraron a Chadwick y el desmentimiento de declaraciones han rondado el caso, que tiene una sola certeza: Camilo Catrillanca fue asesinado con una bala en su cabeza durante un operativo policial en Ercilla.
El martes pasado una descoordinación tiró por el suelo una diligencia crucial en el aeródromo Maquehue. Se trataba de una prueba balística para determinar el origen de la bala que no pudo realizarse. Con formalización el 30 de noviembre del año pasado. Ya han pasado más de tres meses desde que Raúl Evaristo Ávila Morales, suboficial (r) de Carabineros, se mantiene en prisión preventiva. Y hoy, de la mano de la defensa del abogado Javier Jara, se pide su liberación.
Con el argumento de obstrucción a la investigación bajo el brazo la defensa pidió una nueva audiencia para discutir la prisión preventiva de Raúl Ávila. Pero sin duda el argumento más fuerte de la defensa fue la no participación de su cliente en la muerte de Catrillanca. Esto porque la bala habría rebotado antes de entrar en la cabeza del comunero mapuche.
¿Por qué dicen que rebotó?
La defensa de Ávila asegura la inocencia de su cliente. Esto porque la propia autopsia, unida con las conclusiones dicen que la herida es «atípica». Esto porque se puede observar una herida lineal en la cabeza de la víctima con forma de L. Par a la defensa las características de la bala dejan un resquicio un “orificio pequeño y circular” al entrar.
“No negamos que la herida necesariamente le iba a causar la muerte, pero sí era una herida atípica”, indicó Jara. También señaló que en el cuero cabelludo se encontraron al menos 17 trozos de metal. Eso querría decir que el proyectil venía fragmentado, o “trisado”. “Ese efecto se produce que rebotó en una superficie más dura que el proyectil”. Entonces, ¿dónde rebotó? para la defensa lo más probable es la bala que asesinó a Catrillanca y causó “la destrucción de parte de su cerebro” primero rebotó en una superficie más dura.
«Sostenemos que a esta altura de la investigación todavía no se sabe con certeza si el tiro rozó en una goma o una plaza metálica. Pero de que algo lo interrumpió en su paso a la cabeza del señor Catrillanca, eso es efectivo”, aseguró. «No hay ningún antecedente que acredite el homicidio para la defensa, ya que si “le disparó al tractor” este no tendría implicancia», aseguró el abogado.
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Claramente las declaraciones desataron polémica. Tanta que la familia del joven comunero presente en el lugar rompió en llanto.
La audiencia sigue en curso.