La familia de Jenna Johnson encontraron su cuerpo en su casa, en Tierras Altas de Escocia, luego que fueran a buscarla, porque no había aparecido en la reunión familiar como había acordado. Semanas antes la joven despertó llena de moretones y marcas de aguja y cortes por lo que denunció que había sido abusada sexualmente.
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Aparentemente Johnson habría siendo chantajeada por dos hombre que la atacaron sexualmente en diciembre del 2018. Según sus familiares la joven madre había relatado que había sido abusado sexualmente por un hombre, mientras que otro la había violado.
Posterior al ataque, los individuos la amenazaron con difundir el video que habían hecho, según informó Daily Mail.
El miedo de que el registro lograra que le quitaran a sus hijas provocó que Johnson decidiera terminar con su vida, según reveló su hermana. La grabación nunca salió a la luz y la policía no consideró que existiera aspectos sospechosos que indicaran que había pasado otra cosa, constató el medio inglés.
Los acusados de abuso sexual
«No sé si la estaban chantajeando o sólo disfrutaban tener poder sobre ella, pero estaba muy afectada. Jenna fue una amiga leal y totalmente devota a sus hijas», señaló su amiga cercana.
Una vez se realizó la autopsia, los médicos forenses comunicaron que no había resultados concluyentes sobre el ataque del cual fue víctima, probablemente porque ya había pasado mucho tiempo, reveló Daily Mail.
Por otro lado, Johnson antes de morir reveló la identidad de sus agresores. Uno de ellos ya tenía antecedentes en la justicia, ya que había sido considerado como sospechoso en la muerte de un joven de 25 años en 2013, acusación que tiempo después se desestimó.
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