Preocupante. De esa manera se puede calificar las cifras entregadas por la Junaeb en el marco del Mapa Nutricional 2018, informe en el que se detalla la actual situación de los niños y niñas del país con respecto a su condición física. A simple vista, uno de los datos más llamativo, y alarmante, es la estadística centrada en los alumnos de quinto básico, donde la tasa de sobrepeso y obesidad alcanza el 60%.
PUBLICIDAD
La medición fue hecha durante el último año y se consideraron 9.065 establecimientos educacionales de todo el país de enseñanza regular de parvularia, básica y media. La encuesta fue aplicada a cerca de un millón de niños y se utilizaron los estándares de la evaluación nutricional de la Organización Mundial de la Salud para establecer los parámetros.
En la encuesta se abordaron cinco niveles para formar el perfil nutricional y aunque quinto básico es el mas alto, en los otros niveles las cifras superan el 45%. En Prekinder la obesidad y sobrepeso llega al 49%, en kinder 51%, en primero básico 50% y en primero medio los alumnos que están sobre el peso normal es del 46%.
Jaime Tohá, director nacional de Junaeb valora positivamente la inclusión del nivel quinto básico por primera vez en la medición y asegura que es relevante a futuro para definir políticas pública, sin embargo, reconoce que es importante analizarlos de manera más exhaustiva. «Hay una cierta relación en cuanto a la etapa que están viviendo los niños con mayor prevalencia a la obesidad previo a la pubertad pero también es importante hacer un cruce con los hábitos de vida que están teniendo a esa edad y cuáles son las políticas públicas a las cuales se han vistos expuestos».
A pesar de que la Junaeb ha trabajado en elaborar platos más amigables y balanceados para alimentar a los niños del país hay un factor que se escapa a los que pasa en los establecimientos. «La alimentación que reciben fuera de la escuela tiene un tremendo impacto. Sabemos que no solamente tenemos que entregar menús saludables sino que debemos trabajar con apoderados y la comunidad para que alimentación que traen al colegio o comen fuera del colegio sea balanceada y equilibrada durante fin de semanas y vacaciones», asegura Toha.
La diferencia entre regiones del norte y el sur
Otro dato del estudio son las diferencias establecidas según la zona del país, en este punto las regiones del sur del país tienen mayor prevalencia a la obesidad. El caso más preocupante es Magallanes, territorio donde un tercio de los estudiantes de 5° básico tiene obesidad. Por el otro lado, las regiones de Tarapacá, Antofagasta y Arica y Parinacota, muestran menor prevalencia a la obesidad.
PUBLICIDAD
Jaime Veas , decano de la Facultad de Educación de la Universidad Central, asegura que es importante analizar las futuras políticas públicas desde una perspectiva regional. «Los hábitos alimenticios entre el norte y el sur son distintos. Allí está el factor familia, lo que la familia resuelve en la alimentación es bastante incidente ya que los alimentos difieren según zona y claramente en el sur se come de una manera que prevalece la obesidad».
En la Región Metropolitana, en el desglose por comuna, se aprecia que en Ñuñoa, Providencia y Vitacura los niños tiene una mayor prevalencia al peso normal mientras que en San Ramón, Estación Central o Conchalí se observan más niños con sobrepeso poniendo un claro factor socioeconómica en el tema.