El Parlamento británico votó ayer para retrasar la salida del Reino Unido de la Unión Europea y contra la realización de un nuevo referendo sobre el Brexit, al menos por ahora.
PUBLICIDAD
Por 413 votos a favor y 202 en contra, los parlamentarios escogieron la extensión del artículo 50 más allá del 29 de marzo, fecha límite para que Reino Unido abandonara el conglomerado. Ahora se deberá negociar un nuevo plazo con la Unión Europea.
La moción que convocaba un nuevo referendo respecto la permanencia en la Unión Europea o la salida fue rechazada de manera contundente por 334 votos contra 85. El voto no es definitivo, ya que los partidarios de un nuevo referendo pueden intentarlo nuevamente más adelante.
La nueva votación se produce un día después de las caóticas escenas que provocó en la Cámara de los Comunes la decisión de los diputados de descartar un Brexit sin acuerdo sobre las relaciones futuras. Doce ministros optaron por abstenerse en lugar de respaldar la propuesta de May para dejar la UE aún sin un pacto de divorcio.
