Al menos ocho disparos se escucharon al interior de la Escuela de Caballería Blindada de Iquique y el pánico se apoderó de los que estaban en su interior. Un soldado conscripto había tomado su fusil de servicio y había disparado contra un cabo y un sargento, causándoles heridas mortales para luego suicidarse.
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El director de la escuela, teniente coronel Ignacio García, identificó a los fallecidos como el conscripto Marco Antonio Velásquez González, de 18 años; el sargento segundo Fernando Zamorano Fuentes, de 39, y el cabo primero Pedro Benavides Ramírez.
Por causas que se investigan alrededor de las 17:30 horas de ayer, Velásquez ingresó a dependencias de la guardia, función que estaba cumpliendo, y disparó con su fusil contra Zamorano y Benavides , sus superiores del servicio de guardia, y luego se suicidó.
La versión de la familia
El hermano del atacante, Diego Velázquez, contó que su hermano -según reproduce el diario la Estrella de Iquique– había intentado quitarse la vida hace un mes y medio.
«Pasado bala lo pillaron», comento al detallar que «estaba con sicólogo y psiquiatra, debieron darlo de baja y no quisieron».
El hermano agregó que a Marco Antonio lo habían castigado por llegar tarde. «Lo castigaron sin salir a la calle ayer (viernes) en la noche le tocaba guardia a otro conscripto y lo mandaron a él cuando no le correspondía. Yo entiendo que los mató porque lo estaban molestando, mi hermano no tuvo la culpa de nada».
