La cifra de fallecidos por las inundaciones y deslaves provocados por lluvias torrenciales en la provincia más oriental de Indonesia aumentó a 89 personas, con docenas más desparecidas, dijeron funcionarios el martes.
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Las riadas y los deslaves destruyeron carreteras y puentes en varias zonas del distrito de Jayapura, en la provincia de Papua, en la madrugada del domingo, lo que ralentizó las operaciones de rescate.
El lugar más afectado por las crecidas fue el subdistrito de Sentani, donde toneladas de lodo, piedras y árboles procedentes de un deslave en la montaña llegaron a un río haciéndolo desbordar y arrollando a residentes a su paso, señaló el vocero de la Agencia Nacional de Mitigación de Desastres, Sutopo Purwo Nugroho.
Hasta el martes se recuperaron 89 cuerpos de entre el barro y los restos de las viviendas aplastadas, añadió Nugroho apuntando que 159 personas más resultaron heridas, de las cuales 84 fueron hospitalizadas, muchas con huesos rotos y golpes en la cabeza.
Se espera que el número de fallecidos aumente a medida que los rescatistas revisan las zonas afectadas.
Más de 1.600 efectivos, incluyendo soldados y policías, enfrentaban dificultades el martes para limpiar las grandes pilas de escombro ante la falta de maquinaria pesada, explicó el portavoz del ejército en Papua, el coronel Muhammad Aidi.
«Enfrentamos dificultades para retirar los restos y los cuerpos bajo los escombros ya que no tenemos suficientes topadoras”, dijo Aidi, que agregó que los rescatistas buscaban a 74 personas reportadas como desaparecidas y que se teme que estén muertas.
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Alrededor de 7.000 residentes tuvieron que abandonar sus hogares, con más de 400 casas y otros edificios dañados y miles más anegados, según Nugroho.
Las lluvias torrenciales estaciones suelen provocar deslaves e inundaciones que matan a docenas de personas cada año en Indonesia, un archipiélago de 17.000 islas en las que millones viven en áreas de montaña o cerca de fértiles llanuras.
