Luego que el 2018 el Movimiento Social Patriota comenzará una campaña a favor de la compra de productos lácteos locales (#yoprefierocolun), como consecuencia de la aparición de una niña afrodescendiente en la publicidad de Soprole, los problemas para la empresa, parecen no haber terminado.
PUBLICIDAD
Cabe mencionar que la campaña en contra de Soprole, que aseguraba que sus productos eran reconstituidos, y por ende de menor calidad, tenía un trasfondo xenófobo, propio de este movimiento.
Actualmente, se puede ver a través de Twitter, compradores que se quejan por la calidad de los productos de la marca. En el caso de la leche, por la consistencia de ésta, y en el caso de algunos postres y yogurts, por tener contenido hasta la mitad del envase.
Respecto a lo ocurrido el año pasado, Marc Rivers, Director de Finanzas de Fonterra, empresa Neozelandesa dueña del 99,85% de Soprole, declaró telefónicamente a Pulso,que “los porcentajes de margen bruto se redujeron significativamente como resultado de una campaña ‘compra local’, que impactó los precios de venta”.
Ante esta situación y en relación a las especulaciones de una posible venta de Soprole, el CEO de Fonterra, Miles Hurrell, ya había declarado al diarioNZ Herald de Nueva Zelanda, que la empresa podría estar interesada en desprenderse de activos fuera de su país, lo que involucrarían a Sudamérica. Pese a dar cuenta de la venta de Inlaca, símil de Soprole, pero en Venezuela, no nombró a la empresa chilena.