El conflicto en la Franja de Gaza volvió a aumentar ayer luego de que tanto Israel como Hamas se bombardearan mutuamente generando una espiral de violencia.
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Desde el otro lado de Gaza, la organización palestina disparó al menos diez cohetes hacia el sur de Israel. Las sirenas de los ataques aéreos y el poderoso el sistema de defensa Cúpula de Hierro se activaron prohibiendo el paso de lo proyectiles.
Tras el ataque, Hamas anunció que un alto al fuego con el país gobernado por Benjamín Netanyahu entró en vigencia a las 22:00 del lunes hora local (16:00 hora de Chile). No hubo una reacción israelí inmediata.
Más temprano, el ataque aéreo de Israel contra la organización palestina no tuvo el mismo desenlace. Las fuerzas israelíes destruyeron de las oficinas de su líder, Ismail Haniyeh.
Haniyeh se habría escondido ayer temprano, por temor a represalias luego de que un cohete disparado desde Gaza impactara en un hogar israelí e hiriera a siete personas en el centro de Israel. En una declaración escrita el lunes anterior, Haniyeh dijo que el pueblo palestino “no se rendirá” y sus facciones militantes “disuadirán al enemigo si supera las líneas rojas”.
El ejército israelí emitió un comunicado confirmando que bombardeó el edificio, que había “servido como oficina para muchas reuniones militares”. Una explosión anterior destruyó un edificio de varios pisos en la ciudad de Gaza que Israel dijo que había servido como sede de la inteligencia militar de Hamas.
Israel y Hamas han librado tres enfrentamientos, el más reciente en 2014. Aunque ninguna de las partes parece tener interés en una guerra de pleno derecho, la lucha podría fácilmente salirse de control. El conflicto de 2014 duró 50 días y terminó con más de dos mil muertes de palestinos, incluyendo cientos de civiles y 73 muertos en el lado israelí.
