En medio de los violentos enfrentamientos entre Israel y Hamas, el poderoso sistema antimisiles israelí, la «Cúpula de Hierro», destaca como un elemento de protección casi ineludible.
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Se trata de un sistema móvil, desarrollado por la empresa israelí estatal Rafael Advanced Defense Systems, capaz de detectar e interceptar misiles en el aire de cuatro a 70 kilómetros de distancia, según las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF), según recoge CNN. Lejos de una cúpula literal.
Su construcción, que contó con el patrocinio de Estados Unidos, inició en 2007, fue probada los dos años siguientes y finalmente en 2011 fue declarada operativa y la Fuerza Aérea de Israel aseguró que tiene un 70% de interceptación.
Sin embargo, no está exenta de polémica debido a su alto costo. Una batería cuesta 50 millones de dólares (34 mil millones de pesos chilenos) y cada misil tiene un valor de al menos 62 mil dólares (más de 42 millones de pesos), según datos de IDF. Gran contraste considerando que cada cohete Qassam utilizado por Hamas cuesta 800 dólares (544.400 pesos).
A pesar de su gran desempeño al momento de combatir los ataques, Israel planea que su evolución no termine ahí, ya que busca que la «Cúpula de Hierro» llegue a un alcance de 70 a 250 kilómetros de distancia y aumentar su versatilidad con el fin de interceptar misiles desde distintas direcciones.
Conflicto reactivado
Las escuelas en el sur de Israel suspendieron las clases el martes, cuando la violencia amenazaba con aumentar y desatar un conflicto mayúsculo apenas dos semanas antes de las elecciones israelíes.
Los combates cesaron por la mañana, pero la situación seguía siendo tensa. Las fuerzas israelíes apostadas en la frontera con la Franja de Gaza impusieron restricciones a las concentraciones públicas después que se dispararon decenas de cohetes hacia la zona, uno de los cuales demolió una casa en la población de Sderot.
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Durante el lunes, la fuerza aérea israelí bombardeó sitios de Hamas y el grupo más pequeño Yihad Islámica. Los blancos incluyeron un edificio de varios pisos en Ciudad de Gaza que, según Israel, servía de sede para la inteligencia militar de Hamas y la oficina del líder Ismail Haniyeh. El ministerio de Salud dijo que siete palestinos resultaron heridos.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha recibido fuertes críticas tanto de aliados como de opositores por lo que consideran una política incapaz de contener a los milicianos y algunos lo han exhortado a que realice un ataque devastador contra Hamas, que lucha por la destrucción de Israel.