La mayoría de las personas pasan por algún punto de su vida donde sienten que es necesario volver a empezar. Muchos comienzan largos procesos de terapia, ayuda psicológica o incluso a través de medicamentos. ¿Qué pasaría si fuera posible hacer un F5 a la personalidad hasta un punto en el cuál sentías que estabas haciendo lo correcto? Las regresiones a lo largo de la historia de las terapias han sido una técnica clave para encontrar elementos en la vida de las personas que generaron algún trauma, cambio o giro en su forma de comportarse.
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Se basa en la teoría de que una sola decisión puede cambiar todo. ¿Y si pudieras aplicar lo mismo pero de forma inversa? ¿Comenzar a guiar tu personalidad desde el punto preciso antes de que tomaras dicha decisión? Es posible.
Una terapia para mejorar tu comportamiento
La hipnosis clínica permite pelear contra adicciones, malas prácticas, formas de comportamiento y más. Este tipo de terapias te permiten hacer un borrón y cuenta nueva. Incluso hay personas que tienen la capacidad de auto aplicarse hipnosis para cambiar costumbres, comportamientos y más.
Una manera de influir directamente en tu persona e incluso mejorar tu personalidad. La cantante Fergie, por ejemplo, logró dejar todas sus adicciones mediante este tipo de terapias.
El funcionamiento de estas técnicas ha sido altamente cuestionado. No se trata de una ciencia certera. Desde la era del psicoanálisis que la hipnoterapia se consideró como método curativo consistente en la búsqueda de traumas psíquicos de los pacientes bajo estado hipnótico inducido o auto inducido. Es a través de anclajes, o sugestiones, que el terapeuta pide al paciente que abandone sus síntomas o hábitos.
El método autoaplicado (auto hipnosis) también es bastante fuerte, según el estudio. De esta manera es el mismo paciente, quien como terapeuta, se va dando cuenta si algún punto de la modificación de personalidad está comenzando a debilitarse, pudiendo auto aplicar técnicas que le permitan mantenerse en línea.
Efecto cerebrales comprobados
La hipnosis tiene un efecto «muy real» en el cerebro, que puede ser detectado con escáneres, afirman científicos de la Universidad de Hull, en Inglaterra. Hasta ahora ha habido mucho escepticismo sobre si realmente existe el estado hipnótico. Un estudio con voluntarios hipnotizados mostró en imágenes computarizadas cambios en las partes del cerebro relacionadas con el fantaseo y la imaginación.
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Estos patrones cerebrales -afirman los investigadores- no estaban presentes en los participantes que tomaron parte en las pruebas pero no fueron susceptibles a la hipnosis. Tal como señalan los expertos, el estudio publicado en la revista Consciousness and Cognition (Conciencia y Cognición) apoya la teoría de que la hipnosis «prepara» al cerebro para quedar dispuesto a la sugestión. De hecho, los efectos serían mayores en aquellas personas altamente susceptibles.
Los resultados mostraron que en el grupo «altamente susceptible» hubo una actividad reducida en la región cerebral involucrada en el fantaseo y en dejar correr la imaginación, lo que se conoce como la red de «modo por omisión» (DMN, por sus siglas en inglés) que se activa cuando el individuo no está enfocado en el mundo exterior y el cerebro está en reposo, aunque despierto. No es relajación.
Clausurando zonas
Se cree que la hipnosis funciona «clausurando» el DMN, lo que deja al cerebro libre para concentrarse en otras tareas. Tal como afirma el doctor William McGeown, profesor del departamento de psicología de la Universidad de Hull y quien dirigió el estudio, los resultados son «inequívocos» porque sólo se vieron en los individuos altamente susceptibles a la hipnosis.
«Esto demuestra que los cambios en el cerebro se deben a la hipnosis y no a la simple relajación. Nuestro trabajo muestra que la hipnosis es real», asegura el investigador.
Lo necesario es estar seguro del cambio, más que estar «relajado»
Por su parte, el doctor Michael Heap, psicólogo clínico y forense basado en Sheffield, Inglaterra, comenta que este experimento es el primero que muestra los patrones cerebrales que apoyan la teoría de que la hipnosis funciona al «preparar» al sujeto para que responda de manera más efectiva a las sugerencias.
«Aún más importante es que los datos confirman que la relajación no es un factor crítico», agrega.
«La información limitada de este estudio sugiere que este patrón de actividad posteriormente se disipa (por lo menos hasta cierto punto) una vez que los individuos comienzan a comprometerse con las sugerencias «, señaló
Sin embargo, el psicólogo dice que este estudio pequeño, que necesita confirmarse con otros poblaciones, no prueba que las personas que están siendo hipnotizadas esté en una verdadero «trance». Además se requeriría «voluntad», deseo del sujeto a aplicar los cambios que se aplica (o auto aplica) mediante la hipnosis. Por esta misma razón, la técnica sólo podría modificar elementos de comportamiento y no sentimentales o de apego a persona. Un punto clave es que, mediante la modificación de comportamiento, los sujetos podrían lograr ser más expresivos respecto a lo emocional.
El estudio concluyó que las personas que de manera certera desean aplicar los cambios por los que recurrieron a la hipnosis, podrían notar cambios en su comportamiento cotidiano tras un par de sesiones.