La Defensoría Penal Pública abrió un sumario contra el funcionario del servicio en La Araucanía que habría inventado la planificación de atentados en contra de un fiscal de la zona y de la familia Luchsinger-Mackay, para vengarse de su ex pareja.
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Se trata de Mauricio Alarcón Vidal, funcionario de la Inspectoría Zonal Sur de la Defensoría Penal Pública, que está siendo investigado por la Fiscalía Regional de La Araucanía por obstrucción a la investigación y denuncia calumniosa.
Al respecto, dada la gravedad de la imputación, el defensor nacional Andrés Mahnke instruyó el inmediato inicio de un sumario para determinar las circunstancias y responsabilidades administrativas referidas a estos hechos.
El sumario investigará las faltas al Estatuto Administrativo, «para aplicar las sanciones que corresponda en caso de que el funcionario aludido hubiera infringido esta norma», enfatizó la Defensoría en una declaración.
«Como institución del Estado, la Defensoría Penal Pública se rige por este estatuto, por lo que ningún funcionario o funcionaria se encuentra exento de ser investigado bajo esta reglamentación. Paralelamente, también se revisarán en este caso eventuales infracciones al Código de Ética de la institución», concluyó.
Según se informó, Alarcón Vidal habría comprado un chip y lo inscribió a nombre de Ariel Alexis Trangol Galindo, absuelto en el denominado “caso Iglesias” e hizo llamadas a Carabineros en las que un supuesto mapuche amenazaba a un fiscal y la familia Luchsinger-Mackay.
La fiscalía inició una investigación el cual habría descubierto este montaje de Alarcón Vidal, el cual tendría como motivo perjudicar a su ex pareja Valeria Llanquinao y su familia, incriminándolos de un supuesto plan terrorista.
El fiscal Cristian Voullieme pidió el sobreseimiento definitivo de las tres personas que fueron consideradas sospechosas e investigadas inicialmente. Además se apronta a pedir la formalización de Alarcón Vidal por obstrucción a la investigación y denuncia calumniosa.