Desde hace unos días un nuevo escándalo rodea a la realeza. Esta vez el príncipe William y su esposa, Kate Middleton, han sido los involucrados, debido a una posible infidelidad del hijo mayor de la princesa Diana.
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Algunos medios de comunicación ingleses aseguraron que el príncipe William le fue infiel a Kate con su mejor amiga y vecina Rose Hanbury, Marquesa de Cholmondeley.
Hasta ahora el Palacio de Kensington no se había pronunciado sobre el hecho, pero parece que el príncipe William está cansado de los rumores y ha decidido tomar acciones y responder ante estas acusaciones.
A través de un gabinete legal londinense, el bufete Harbottle y Lewis, quien ha representado a la familia real en otras ocasiones, el príncipe William ha salido a defenderse, alertando sobre las consecuencias que podría tener insinuar que ha sido infiel a su esposa y madre de sus tres hijos.
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En una carta enviada por el bufete de abogados a un medio de comunicación, deja muy claro lo que puede ocurrir si los rumores siguen siendo publicados, «sabiendo que son falsos».
«Además de ser falso y dañino, la publicación de falsa especulación respecto a la vida privada de nuestro cliente también constituye una violación de su privacidad, conforme al artículo 8 del Convenio Europeo de Derechos Humanos», dice parte de la carta.
