Antes de que el Presidente Sebastián Piñera partiera rumbo a China la polémica se había encendido. Todo a raíz de la decisión de no visitar la fabrica de Huawei, por un conflicto entre Estados Unidos y la compañía de tecnología y telecomunicaciones. ¿Decisión correcta? Analistas políticos señalan que no, ya que la imagen del Presidente se vio debilitada al ceder ante presiones del país norteamericano.
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Sin embargo, ese sería solo el comienzo. La comisión que acompaña a Piñera considera no sólo autoridades de gobierno, sino que también a representantes del mundo empresarial. Y es en este contexto que el presidente ejecutivo de Codelco, Nelson Pizarro, criticó al Gobierno.
No invitaron a ningún representante de la minera estatal al viaje del presidente Sebastián Piñera a China, país que compró más de la mitad de la producción de cobre de la compañía durante 2018.
Polémica con Codelco
“Y alguien me decía, ‘¿y en este viaje a China de nuestras autoridades está Codelco?’ ¿Cómo se puede ir a China, que es el principal comprador de cobre, sin Codelco presente?”, dijo Pizarro durante el Minnin Summit 2019. Sin embargo, tras ser llamado por Contraloría a una citación, el ejecutivo se retractó de sus palabras.
«Lo obligaron a retractarse. Si te fijas en declaraciones anteriores, por otros temas, Pizarro jamás se había retractado por nada. Le dieron un tirón de orejas directo», señaló a Publimetro el analista político y académico de la Universidad Mayor, Germán Silva.
Los hijos a cargo de las empresas
Otro detalle que ha generado ruido, respecto a quienes acompañan al Presidente, es la presencia de sus hijos Cristobal y Sebastián.
«Más allá del hecho de que vayan en el avión, siendo que los Piñera perfectamente podrían haber pagado su propio pasaje, es algo imprudente. Se presta para todo tipo de interpretaciones», añade el académico. Esto, pues hay que recordar que los hijos de Sebastián Piñera son quienes administran hoy parte de su presupuesto.
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«Esto parece más un viaje para negociar intereses propios», señala Daniel Ibáñez, presidente de la Fundación Participa. Cabe destacar que los hijos del mandatario no sólo viajaron a China con su padre, sino que están participando de la reuniones y actividades oficiales.
«Pareciera que están más preocupados de abrir las puertas de China a los negocios de Piñera que de los intereses del país», sentenció el abogado.
China sí, Venezuela no
Siguiendo con las nubes negras que rodean este viaje, el Presidente señaló, respecto al régimen comunista Chino, que «cada uno tiene el sistema político que quiera». Algo que se contradice con la postura que ha tenido con Venezuela y el régimen de Nicolás Maduro.
«Eso ha sido un show mediático y a todas luces, con estas nuevas declaraciones, lo único que hace es contradecir todo lo que ha demostrado en los últimos meses», señala Silva.
Según el académico, el punto clave es que «con China tiene negocios, y al parecer Piñera parece olvidar sus principios». «¿Y si le vendiéramos cobre a Venezuela?», cuestionó.
Ibáñez concuerda, agregando que «más que un demócrata, se ve como un oportunista». «Se preocupa solo de sus intereses y de llevarse bien con Estados Unidos», añadió el presidente de Fundación Participa.
Chadwick en el centro del huracán
Como «guinda de la torta» se suma la polémica del ministro Chadwick y el caso de los fiscales. No es primera vez que el Ministro del Interior está en el centro de la opinión pública mientras ejerce como vicepresidente: pasó algo similar durante la polémica del caso Catrillanca.
«En cualquier Gobierno serio, ya lo habrían sacado. Son polémicas no menores», explica Daniel Ibáñez. En la misma línea, Germán Silva considera que la suma de ambos casos hace poco sostenible que Andrés Chadwick se mantenga en su cargo.
¿Cambio de gabinete? ¿Cambio de actitud?
«Es probable que esté en la lista para el próximo cambio de gabinete», añade el especialista. Ambos analistas consideran que el hecho de que el Presidente haya señalado que Chadwick «respondió con meridiana claridad», deja sobre la mesa muchas interrogantes.
«Lo que dijo Piñera apunta a que Chadwick no aclaró bien las cosas, sino que ‘más o menos’. Esto deja ver otra debilidad: Piñera está actuando como vocero de Gobierno a la vez. Dejó atrás su prudencia, y cada día se asemeja más a su versión del 2010», sentenció Silva.
