Cuando conocemos a alguien y tenemos una cita con esa persona, podemos empezar a vivir momentos estresantes. Algo común es matarse la cabeza pensando cómo debemos vestirnos, qué debemos decir, qué actitud manifestar o si la otra persona está realmente interesada. Es especialmente esto último a lo que más se le suele prestar atención sin saber a ciencia cierta su respuesta. Después de todo, la gente suele engañar a los demás sobre el interés sexual que comunica.
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De hecho, existe el mito que dice que las mujeres a menudo «se hacen las difíciles» a la hora de una cita. Por otro lado, se dice que los hombres son los que expresan más de frente su interés sexual. Sin embargo, ¿qué tan cierta es esta creencia?
La anterior pregunta se la hicieron un grupo de profesores de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología. La razón es que anteriores investigaciones han señalado que la gente suele caer en percepciones sexuales erróneas. En ellas se señala que los hombres tienden a leer de forma exagerada un interés sexual alto de sus citas. Por eso se quiso investigar sobre qué sexo ocultaba más sus intenciones a la hora de tener un potencial encuentro amoroso o sexual. Los resultados de esto están publicados en Evolutionary Behavioral Sciences.
Para efectos de la investigación, se realizó una encuesta anónima a 435 estudiantes universitarios. Así, se les preguntó sobre la última vez que conocieron a un potencial compañero sentimental y/o pareja sexual. Además, se les pidió detalles sobre qué tan atraídos se sintieron ellos y qué tanto percibían de la otra persona. Por último, también se les solicitó detallar qué tantas «señales» habían enviado y recibido en la cita.
Los resultados de la encuesta
Se supo que la creencia de que las mujeres «se hacen las difíciles» es un mito. No hubo evidencia alguna de que su expresión de señales fuera menor a la atracción sexual que sentían. En realidad se supo que se mostraban más interesadas en el sexo de lo que realmente estaban. La única excepción en la que mostraban una exagerada timidez era cuando la atracción era más alta de lo común.
Caso contrario sucedió con los hombres. Se demostró que ellos ocultaban su interés muchísimo más de lo que hacían las mujeres. No obstante, al igual que ellas, el caso se agravaba cuando el interés real era mucho más alto de lo normal. En otras palabras, se puede decir que si alguien «juega a hacerse el difícil» es más probable que sea hombre.
Por último, se señalaron también las principales razones de terminar en la cama. Las mujeres tendían más a acceder a un encuentro sexual si encontraban atractiva a la otra persona. Mientras tanto, los hombres tendían a prestarle más atención al historial sexual de su potencial pareja.
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