Tras el polémico viaje a China, Cristobal Piñera Morel, hijo del Presidente de la República, nuevamente está en el ojo del huracán. Un reportaje del medio Interferencia lo vinculó con un emprendimiento tecnológico que ha obtenido más de 250 millones de pesos por órdenes de compra al Estado. Gran parte de ellas, cuando su padre ya era Presidente.
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«Hopin Inc.» es el nombre del emprendimiento tecnológico del cual Cristóbal Piñera es uno de los fundadores. Lo que partió como un startup e intento de red social (Hop.in) terminó en 2015 prestando servicios a instituciones públicas como HopIn Chile SpA. Pero el reportaje señala que del total obtenido $200 millones fueron percibidos entre el 11 de marzo y el 31 de diciembre de 2018, cuando su padre ya estaba en el poder. Este año ya van $45 millones más.
Explicaciones por Twitter
Ante la publicación, Piñera Morel acusó a través de su cuenta de Twitter una mala intensión por parte del medio y explicó que el 7% de la propiedad de la empresa la cedió en julio de 2018, desligándose completamente. «¿Y lo que ganó entre el 11 de marzo y julio?», se preguntó Daniel Ibañéz, presidente de Fundación Participa.
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«Claramente tuvo meses en que facturaron varios millones, pero este personaje cree que tiene respuesta para todo», acusa el abogado. Para Ibáñez esta situación demuestra que «ya no hay pudor». «Primero miente por el viaje a China diciendo por Twitter que cubrió todos sus gastos, cuando es imposible pagarle un pasaje a la Fach. Esto deja mal a la Presidencia como institución. Parece que el hijo del Presidente puede hacer cualquier cosa y no pasa nada», acusó.
Según el presidente de Fundación Participa toda la clase política está siendo parte de un silencio cómplice. «El oficialismo no dice nada y la oposición tampoco. ¿Tal vez por que vimos algo similar con el caso de Dávalos? Deberían ser más activos. Al menos uno esperaría que ocupen las herramientas disponibles como una comisión investigadora o acciones de Contraloría», añadió Ibañez.
«Lo más injusto es que a miles de emprendedores chilenos les encantaría conocer contactos para hacer crecer sus empresas en China, así como también, les encantaría ofrecerle servicios al Estado. Pero al parecer, al ser hijo del Presidente o de un ex Presidente el tema es más fácil», acusó.