El gobierno del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, continúa acudiendo a su principal caballito de batalla: las armas, pero esta vez no para su uso libre sino que para las fuerzas armadas y de seguridad.
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Según pudo conocer O Globo, el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública prepara una megalicitación para adquirir 106 mil pistolas para la fuerza nacional y los efectivos de la policía civil y militar por un monto estimado de 110 millones de dólares.
El 15% de estas armas, que serían para 15 Policías Militares, diez Policías Civiles, 16 órganos de pericia oficiales y la Fuerza Nacional, serán compradas por la secretaría Nacional de Seguridad Pública (Senasp), según aclara el medio junto con asegurar que Río de Janeiro no está contemplado en esa cuota.
Esta licitación sería el resultado del decreto de armas editado por Bolsonaro, ya que el mismo posibilitó la importación de armas sin la autorización del Ejército.
