Un fuerte temblor de 6,8 grados en la escala de Richter, con epicentro en la costa del Océano Pacífico, afectó en la madrugada a El Salvador. Afortunadamente no se registraron mayores daños materiales ni víctimas fatales, pero aún así las autoridades preliminarmente activaron la alerta de tsunami y los protocolos de evacuación de las zonas costeras.
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El ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales informó que el sismo, registrado a las 03.03 hora local, tuvo una profundidad de 48 kilómetros y su epicentro se situó frente a la costa del departamento de La Libertad, a 66 kilómetros al sur de la playa Mizata.
En relación a nuestro país, el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA), aseguró a los pocos minutos que el movimiento telúrico «no reúne las características necesarias para generar un tsunami en las costas de Chile».
Tres horas después del temblor las autoridades locales levantaron la alerta de tsunami, ya que el mar sólo subió 30 centímetros, mientras los trasnochados habitantes de la costa del país centroamericano comenzaron a volver a sus casas para comenzar una jornada laboral con las tremendas ojeras.